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El desayuno es el alimento más importante del día, por lo que ayunar en forma prolongada solo hará que el cuerpo almacene en forma de grasa los alimentos que se ingieren después, señaló el coordinador de Nutrición y Dietética del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Alejandro Jiménez Ortiz.
“Es muy importante que no se realicen ayunos prolongados, sobre todo al momento de comenzar con un régimen o plan alimenticio para bajar de peso; aunque al inicio, estos ayunos sí condicionan una baja en el peso, pero después de un mes el organismo se acostumbra, se genera un cambio en el metabolismo y comienza a almacenar grasa, a esto se le conoce como gen ahorrador”, indicó el especialista.
El gen ahorrador es un mecanismo de defensa de nuestro organismo, que se activa cuando se presentan ayunos prolongados con gran periodicidad, lo que origina que el mismo organismo en cuanto comienza a recibir alimento después de un ayuno, lo almacena en forma de grasa.
Agregó que el ritmo de vida actual ha implicado que nuestros hábitos alimenticios se hayan modificado en forma negativa en cuanto a calidad y cantidad.
Dijo que es muy importante que una vez que nos despertemos y levantemos de la cama, el primer alimento se realice en un lapso no mayor a dos horas, ya que nuestro cuerpo tiene memoria y cuando ayunamos por periodos largos, lo que se genera es que se coma en exceso y origina que nuestro cuerpo almacene toda esa energía como grasa porque se está preparando para el próximo ayuno y eso provoca que en lugar de disminuir se aumente de peso.
Recomendó que si no se tienen tiempo para preparar un desayuno completo y en forma, éste sea sustituido por algo de fruta o algún lácteo, finalizó diciendo “el cuerpo tienen que tener algo de energía para arrancar después del periodo de dormir”.
sergio.marin@clabsa.com.mx
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