Edith Pérez Rodríguez, madre buscadora y activista del Colectivo Voz y Dignidad por los Nuestros, detalló que las madres buscadoras de diferentes municipios de San Luis Potosí, además de su labor de búsqueda, forman parte de “Bordando hilos de amor y de esperanza”, una actividad que les sirve como círculo de contención y de apoyo mutuo.
“Nos sentimos escuchadas en un ambiente en donde solamente nosotros, los que sabemos qué hemos pasado, podemos sentirnos en confianza”, detalló en entrevista para EL UNIVERSAL San Luis Potosí.
Esta práctica, según indica Edith, sirve para formar resiliencia, acompañamiento y una descarga emocional a través del bordado, donde las madres o, en su caso, padres buscadores, cuentan las anécdotas de sus hijos o familiares desaparecidos mientras se sienten acompañados.
“Surge la actividad aquí en San Luis durante pandemia, que no podíamos salir a búsqueda, pues lo hicimos y después, en nuestras búsquedas, en nuestras reuniones, en lugares los exhibimos. Se trata también de visibilizar”, explica.
Asimismo, Edith Pérez relató que las madres buscadoras carecen de un acompañamiento psicosocial adecuado, puesto que, muchas veces, los psicólogos se ven totalmente rebasados en el tema de la desaparición de personas, por lo que estos círculos de apoyo sirven para que aquellos quienes tienen desaparecido a un familiar o ser querido puedan generar una red de apoyo.
Los municipios en los que realizan la actividad “Bordando hilos de amor y de esperanza” son Rioverde y Cerritos, ambos señalados por el mismo colectivo como los que registran un crecimiento exponencial de desaparecidos en lo que va de este año.
El pasado domingo 9 de julio las madres buscadoras se juntaron en diferentes puntos de sus ciudades para compartir, bordar y visibilizar la desaparición de una manera diferente.
Edith Pérez espera que próximamente se pueda hacer un encuentro de bordados, donde sus trabajos se cuelguen en tendederos o, también, que se los queden las propias mamás.