Luego de que el Congreso del Estado aprobara nuevos impuestos para 2025 como es el cobro de entre 3 y 4 por ciento a enajenación de bienes inmuebles, bebidas alcohólicas y al hospedaje, el arzobispo de San Luis Potosí, Jorge Alberto Cavazos Arizpe consideró que las autoridades deberían primero apretarse un poco más “el cinturón” antes de cargarle la mano a los contribuyentes.
Comentó “incluso la señora Presidenta ha pedido la austeridad de quienes se desempeñan en el servicio público… yo creo que todos, todos debemos considerar por incertidumbres de nuestra economía amarrarnos un poco las manos en el gasto, gastar solamente lo que necesitamos lo que es más importante y urgente”.
Cavazos Arizpe añadió que definitivamente de alguna u otra manera va a impactar en el bolsillo de las personas, es importante considerar que las personas tienen su trabajo y salen adelante a veces con demasiado esfuerzo y les queda muy poco para un ahorro para enfermedades o alguna situación inesperada.
Dijo además que es una realidad que desde la federación hay un recorte que está afectando a estados y municipios, por lo que se están viendo limitados de recursos y se han visto obligados recurrir a la recaudación propia para poder llevar a cabo los programas esenciales y servicios básicos “no soberbios, solo lo mínimo”.
Finalmente indicó que el hecho es que tener que pagar nuevos impuestos siempre va a crear incertidumbre y tristezas, porque la falta de economía si es una angustia para las personas “a todos nos ha pasado” y aunque el dinero no lo es todo en la vida, si ayuda a resolver muchas cosas “desde lo que se lleva a la mesa para comer y hasta algún momento de esparcimiento”.