Este martes la organización “Congreso Calificado” emitió su segunda evaluación trimestral, en donde 26 de los 27 legisladores resultaron reprobados, explicó que el mal desempeño de la Sexagésima Cuarta Legislatura obedece entre otras cosas a una baja productividad, puesto que se presentaron 144 iniciativas y solo se dictaminaron 32, es decir solo una de cada cinco.

Asimismo detalla que también está el tema del ausentismo, puesto que se contabilizaron 17 sesiones entre ordinarias, extraordinarias y solemnes, en donde hubo una diputada como lo es Frinné Azuara Yarzábal que faltó 12 veces, es decir que su ausentismo llegó hasta el 70 por ciento, seguida de su correligionaria priista que faltó 53 por ciento de las veces.

Asimismo se le aplicó el indicador negativo por conducta perniciosa a la legisladora del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) Roxanna Hernández Ramírez luego de que acudió a un programa radial en donde denostó en vivo a los conductores del mismo y en lugar de disculparse, procedió a bloquear a los periodistas en redes sociales.

Cabe destacar que de manera general el panista Rubén Guajardo Barrera fue el diputado mejor evaluado con 6.8 y la peor evaluada fue la lideresa del PRI, Sara Rocha Medina que incluso tuvo números negativos llegando hasta el – 5.5.

Al respecto de esta evaluación el diputado Héctor Serrano Cortés sostuvo ser respetuoso de este tipo de ejercicios puesto que cualquier persona está en su derecho de calificar el desempeño de sus representantes populares, pero esto no quiere decir que esté de acuerdo con ellos y aseveró que la actual legislatura es de las más productivas.

Expuso “es una propuesta unilateral, con nosotros nunca ha habido comunicación alguna, nosotros tenemos nuestros propios instrumentos institucionales de medición, no tengo más que decir al respecto más que, me parece que es la percepción que ellos quieren difundir, pero yo tengo datos y puedo decir por experiencia de otros diputados es que ha sido una legislatura con una gran actividad”.

Finalmente insistió en que así como este organismo da una calificación con su propia metodología, así lo puede hacer cualquiera, el Congreso del Estado está abierto al escrutinio público, es válido y aceptable que cada quien forme su opinión, pero “yo considero que es todo lo contrario, que ha sido una legislatura con una gran actividad, ha habido consensos y austeridad”.

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