Hace dos meses que Juan Carlos salió de Honduras en búsqueda de un mejor futuro para su familia, aunque asegura, la parte mas dolorosa de tomar la decisión de alejarse de su tierra fue dejar a su madre, quién se encuentra enferma del corazón, sin embargo, la necesidad que padece su país y la carencia de recursos económicos fueron un fuerte motivo para irse, pero su meta no es conquistar el sueño americano, sino quedarse en San Luis Potosí.
"Lo más me duele es haber dejado a mi mamá a mis hermanas y la verdad las extraño mucho, me duele que por cosas de situaciones del país me haya tocado que dejarlas, pero yo sé que es para un futuro mejor para ellas, porque lo que más me duele es que quedó enferma", dijo.
La situación no ha sido fácil, el trayecto también fue doloroso, sufrió hambres, soportó bajas temperaturas que implica el viaje en tren, en la frontera con México fue víctima de un asalto, entre otros delitos, y en este tiempo no ha logrado tener contacto con su familia para avisarles que está bien.
Actualmente está refugiado en la Casa del Migrante de San Luis Potosí, donde ha recibido apoyo para restablecerse.
En esta temporada, la casa del migrante ha registrado un considerable incremento de centroamericanos que van a Estados Unidos en busca de un futuro mejor, tan sólo en el mes de marzo se recibieron 1,050 personas, en su mayoría provenientes de Honduras.
Durante marzo incrementa el flujo de migrantes debido a que hay una notable mejoría en las temperaturas del país, que les permite viajar con menos riesgos de enfermarse en el camino, además inicia la temporada de cosechas en Estados Unidos por lo que tienen mayor oportunidad de conseguir un trabajo en la pizca. También se ha notado un incremento considerable en la cantidad de mujeres y niños que salen de su país con la intención de buscar un futuro mejor.