Desde las siete de la mañana, Luis se despertó emocionado y alegre para desayunar y prepararse para el regreso a clases presencial y volver a ver a sus amigos en el salón de clases.
Pese al frío y contagios por Covid-19 que permanecen en la entidad potosina, más de 500 mil alumnos de educación básica retornaron a las aulas, en su mayoría portando su respectivo uniforme, para continuarse formando, tras cerca de dos años de contingencia sanitaria derivada del virus SARS-CoV-2.
Para la señora Karla, el regreso de su hijo que cursa segundo de primaria en la Escuela Pedro Montoya, el regreso a clases es significado de un buen desarrollo físico y mental para el menor que durante varios meses tomó sus clases de manera virtual, así como que para ella representa el también retomar sus actividades diarias con mayor libertad.
Destacó que el centro escolar durante la entrada y salida de los menores respetó los protocolos sanitarios, así como que a los papás se les exigió el uso de cubrebocas bien colocado de manera obligatoria para dejar y recoger a los menores de edad, con el fin de evitar una posible propagación del virus.
