La obsesión por hacerse auto retratos, para publicarlos en redes sociales, con el fin de volverse ‘influencer’ o ganar una gran cantidad de “me gusta” y comentarios positivos, podría tener ciertas repercusiones en el autoestima de quien padece “selfitis”, como se le conoce a esta conducta.
En 2014, aparecieron historias en medios nacionales e internacionales que afirmaban que la condición de ‘selfitis’ (la obsesiva toma de selfies) debía ser clasificada como un trastorno mental por la Asociación Psiquiátrica Americana y que la condición podía ser límite, aguda o crónica.
El psicólogo Jaime Sebastián Galán, explicó que aunque hoy en día el uso del celular y todas sus aplicaciones en jóvenes es la forma más común de comunicarse, cuando se trata de una persona de mediana edad a avanzada quien publica constantes selfies, podría tratarse de una manera de compensar la falta de autoestima y llenar un vacío en la intimidad.
"Quizá podríamos relacionarlo si la persona se siente bien o mal con su publicación creo que desde la vista de los adultos so seria una conducta a analizar, pero desde la vista de los jóvenes yo creo que cada vez menos se relaciona con una cuestión de baja autoestima sino más bien como una forma de dialogar entre jóvenes"
Lo que si podría tratarse de un trastorno que requiere ser atendido, es la modificación de estas imágenes a través de filtros, pues en estas se recurre a una distorsión de la realidad, ´posiblemente para buscar aceptación o halagos de quienes la vean.
"Quienes le conocen saben que así no es la persona, entonces habría que ver qué tanto estamos hablando del mercadeo de la imagen, o una promoción de una imagen que está enmascarada por varios filtros. Hablamos de una alteración de la imagen propia cuando también tratamos de mostrar otra, y la cantidad de filtros empleados en las imágenes si nos podrían hablar de alguna situación psicológica a atender"
Reveló que mediante las auto fotografías se revela cómo muchos usuarios persiguen la vanidad y la admiración de sus atributos físicos e intelectuales lo cual puede conllevar a problemas psicológicos como depresión, trastornos obsesivos – compulsivos y dismorfofobia, por citar solo algunos.
Al igual que con la adicción a Internet, el concepto de ‘selfitis’ comenzó como una moda entre los medios de comunicación, pero investigaciones recientes que incluyen el presente documento han comenzado a validar empíricamente su existencia.
Los investigadores aseguran que, por norma general, las personas diagnosticadas con 'selfitis' sufren "falta de confianza en sí mismas, buscan encajar de alguna forma con quienes les rodean, y pueden mostrar síntomas similares a otros comportamientos potencialmente adictivos."
maria.hernandez@clabsa.com.mx
gpl