Estado

Gasto millonario en comida y horas extra en Congreso

El poder legislativo erogó más de 3 millones en el segundo año de ejercicio legal.

FOTO: Archivo. El Universal San Luis Potosí.
07/02/2018 |03:00
Nancy Lizet Hernández
RedactorVer perfil

El Congreso del estado es una de las instituciones a las que mayor rechazo han manifestado los ciudadanos en San Luis Potosí. La principal molestia es el excesivo sueldo en comparación del nulo desempeño que los representantes realizan por el distrito que los eligió.

La dieta mensual de los diputados supera los 110 mil pesos, además de contar con apoyos de gestorías (se han exhibido casos de facturas y firmas falsas para justificar la asignación del recurso), vehículo, gasolina, gastos médicos, entre otros.

Otro de los excesos es el recurso que los legisladores destinan al consumo de alimentos en oficinas o eventos oficiales; en febrero del 2017 el diputado José Luis Romero Calzada presentó una iniciativa para que se eliminará la partida de apoyos por el gasto de alimentos, esto, ante la medida de austeridad anunciada por el legislativo local, sin embargo, esta práctica común entre los diputados continúa.

Lejos de cumplir con estas medidas, el Congreso erogó en el segundo año de ejercicio legal tres millones 310 mil 131 pesos, en alimentos y horas extras, información obtenida a través de una solicitud de información.

Gasto millonario en comida y horas extra en Congreso

En el rubro de tiempo extra de septiembre del 2016 a septiembre del 2017 las arcas del Congreso del estado desembolsaron un millón 979 mil 706 pesos. Los meses en los que más se gastó por este concepto son noviembre con 286 mil 295 pesos y enero con 281 mil 118 pesos.

El gasto por el concepto de alimentos registra una elevada cantidad en las finanzas del Legislativo, basta con asistir a las sesiones de pleno para detectar las comilonas a las que se someten los legisladores, o las reuniones de comisiones legislativas donde su paladar degusta de la fina y costosa nuez de la India y galletas gourmet.

Bajo el concepto de alimentación en oficinas o lugares de trabajo en el segundo año legal, el Congreso destinó 299 mil 993 pesos, mientras que en alimentación en eventos oficiales la cifra se triplicó erogando un millón 30 mil 431 pesos. En total de ambos rubros, el gasto fue de un millón 330 mil 425 pesos con 50 centavos.

vkc