La iglesia católica en San Luis Potosí llamó a las autoridades a "no lavarse las manos" ante la posibilidad de que se implemente el "fracking" en la región de la Huasteca potosina, pues consideró que aun cuando se refiera que es un tema del ámbito federal, la administración estatal tendrá que allegarse de todos los elementos de información para presentarlos como evidencia de viabilidad o inviabilidad según sea el caso, dijo el vocero del arzobispado Juan Jesús Priego Rivera.
El sacerdote fue claro al señalar que ya basta de que se ponga en primer lugar el dinero antes que los temas ambientales, donde las repercusiones sobre el agua, el aire y el suelo en una región como esta, puede tener daños irreversibles que difícilmente podrán ser subsanados.
"No estamos tajantemente en contra, pero sí que se tenga toda la información posible sobre los daños que pudiera generar este tipo de prácticas, y presentar las ventajas y las desventajas que se tendrían, que no se oculte o no se manipule información. A lo mejor genera riqueza económica, pero no compensaría que la zona se quede sin árboles o sin terreno verde", señaló.
Priego Rivera hizo un llamado enérgico para que las autoridades correspondientes defiendan los intereses de los potosinos en un tema que es de vital importancia, pues recordó que la afectación al medio ambiente ya es una realidad a través del calentamiento global, mismo que ha suscitado grandes conflagraciones en otras latitudes a causa del desarrollo de proyectos cuyo único interés es el monetario.
apl