Oliver Vargas Rocha, es un joven de apenas 10 años, originario de la comunidad Santa Rita de los Hernández, en el municipio de villa de Guadalupe, que fue galardonado con la distinción de soldado Honorario, en una ceremonia del Ejército Mexicano en el 40 batallón de infantería en San Luis Potosí, apenas hace unos días.
Desde muy temprano, acompañado de sus familiares, Oliver acudió a las instalaciones del 40 batallón de infantería, ubicado en la avenida Calzada de Guadalupe, en donde el personal del ejército mexicano lo encaminó al interior del inmueble, para cambiarlo con el típico uniforme verde oliva camuflajeado que portan diariamente, para posteriormente iniciar con la ceremonia para ser un soldado honorario, en donde recibió un reconocimiento y su placa de identidad que lo convirtió a su corta edad en un soldado mexicano.
“Solo las personas nobles de corazón como tú pueden ver más allá de lo evidente y descubrir detrás de ese rostro duro y coraza de acero del soldado, el corazón del ser humano que siente, que sufre, que llora por su patria... jamás te dejes vencer, Dios te protege y nosotros te acompañaremos en este sueño de ser soldado honorario”, comentó durante su intervención el Teniente Cirujano Dentista, Aladair Lozano.
Para Oliver, el convertirse en un soldado de la Secretaría de la Defensa Nacional, comenzó a sus ocho años de edad, luego de ver diversas películas en donde su principal sueño ha sido convertirse en soldado al crecer, según contó su madre, la señora María Elena Rocha.
Foto: Xochiquetzal Rangel
Su sueño pudo materializarse gracias al apoyo de la fundación “Cumple un Sueño”, pues Oliver fue diagnosticado y referido a un Hospital en la capital potosina desde los cuatro años, con una enfermedad denominada “Síndrome de Hipergammaglobulinemia”, que afecta directamente a su salud, ya que su sistema inmunológico no produce las suficientes defensas para evitar infecciones, fiebres o diversas enfermedades como las respiratorias.
María Elena Rocha, comentó que desde hace seis años acuden cada mes a la capital potosina para la atención de Oliver, ya que requiere mensualmente una vacuna cuyo costo asciende a los 10 mil pesos, para evitar una recaída, sobre todo durante la contingencia por Covid-19 que se vive en el país, ya que en caso de que no se le aplique suele enfermarse y requiere hospitalización por la enfermedad hereditaria y no curable que padece.
Pese a que desde hace algunas semanas Oliver se encuentra Hospitalizado, debido a que requirió oxígeno medicinal, por una situación en sus pulmones, su mamá comentó que el pasado 6 de octubre, el estado de ánimo de su hijo cambió ya que se emocionó al saber que saldría durante unas dos horas del Hospital, con previa autorización médica.
“Cuando le dijeron que iba por él al hospital estaba muy feliz, porque venía a ser soldado”, comentó María Elena Rocha.
Con dificultad para hablar, debido al problema en sus pulmones, el soldado honorario Oliver dijo sentirse feliz con su nombramiento.