La Secretaría del Trabajo y Previsión Social de San Luis Potosí trabaja de la mano con distintas asociaciones y empresas privadas para la inclusión de personas con discapacidad en el campo laboral.
Areli Aguilar Dávila, titular del Servicio Nacional de Empleo, detalló que actualmente se trabaja en la vinculación e inclusión con la empresa Cummins, que ha sido una de las principales empleadoras para personas con discapacidad motriz, auditiva, intelectual y además ofrece oportunidades de trabajo a adultos mayores.
A nivel nacional el SNE cuenta con 27 centros en todo el país que ofrecen las evaluaciones VALPAR para abrir espacios laborales a personas con discapacidad y adultos mayores.
La evaluación profesional constituye en un proceso cuya meta es facilitar la transición de la escuela a la vida adulta y la integración de las personas con discapacidad. Con esta evaluación se identifican las necesidades, habilidades funcionales, aptitudes, logros, e intereses.
A través de esta valoración se canaliza al interesado a alguna empresa o centro de trabajo que corresponda a las habilidades arrojadas por el sistema ya mencionado.
La funcionaria comentó que en el caso específico del síndrome de Down, se toma en consideración el nivel de estudios y el avance de su desarrollo intelectual para canalizarlos a las empresas que estén solicitando esos perfiles, ahondó que se ha logrado que las empresas asuman una gran responsabilidad social incluyente, al ser abiertas en no especificar sexo, edad, ni condiciones generales; sino más bien se enfocan únicamente en que el postulante reúna las necesidades de la vacante.
“Muchos de los chicos con síndrome de Down hemos tenido muy buena respuesta en el aspecto de que nos ayudan para orientar a la gente, en atención al cliente hemos tenido muy buena respuesta”.
Por su parte, la STPS se da a la tarea de verificar y monitorear que las empresas cumplan con las obligaciones patronales, es obligatorio que se ofrezcan prestaciones de ley, salarios competitivos y se respeten los horarios de jornadas laborales.
Entre los incentivos para las empresas que se suman al tema de inclusión, se establece que, el patrón que contrate a personas que padezcan algún tipo de discapacidad: motriz, mental, auditiva o de lenguaje, en un ochenta por ciento o más de la capacidad normal o tratándose de invidentes, podrá deducir de sus ingresos, un monto equivalente al 100 por ciento del Impuesto Sobre la Renta (ISR).
apl