Es necesario fortalecer la prevención y contención de consumo de tabaco coadyuvando con las acciones de gobierno que dañan a los alumnos de diversas instituciones educativas. Por tal motivo, el diputado Fernando Chávez Méndez, presentará a consideración del pleno del Congreso local, una iniciativa para adicionar al artículo 20 bis de la Ley Estatal de Protección a la Salud de las Personas No Fumadoras.

El propósito es establecer como obligación que las familias y autoridades de instituciones educativas adquieran medidas de prevención. Con esta reforma se consigna que alumnos, maestros, padres de familia, personal administrativo, asociaciones de padres de familia de instituciones públicas o privadas, deberán colaborar de manera individual o colectiva en la vigilancia de éste cumplimiento.

Chávez Méndez señala que en lo particular se debe evitar que niñas, niños o adolescentes consuman o adquieran a través de cualquier medio producto derivado del tabaco. “Esta no es una cuestión sencilla, requiere de la participación de actores sociales e institucionales, de encargados de la educación, de la protección social y de la justicia”.

Dijo que el tabaquismo es una de las mayores amenazas para la salud pública que afronta el mundo. Provoca el deceso de más de siete millones de personas anualmente, de las cuales más de seis millones son consumidores directos y alrededor de 890 mil son fumadores pasivos o involuntarios, expuestos al humo del tabaco.

Añadió que de acuerdo a datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) la industria del tabaco podría ser considerada como una de las más altas en letalidad del globo terráqueo, pues su consumo mata a poco más de la mitad de sus consumidores. Detalló que el 80 por ciento de los más de mil millones de consumidores de tabaco, viven en países de ingresos bajos o medios, donde es mayor la carga de morbilidad y mortalidad y que se encuentra relacionada al tabaquismo.

Investigaciones revelan, expresó el diputado que el alcohol y el tabaco han estado permanentemente en prácticas sociales y su uso es aceptado pese a las demostraciones de ser factores de daño a la salud, denominadas a la vez, como drogas lícitas o permitidas por la misma sociedad.

vkc

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