La Secretaría de Educación del Gobierno del Estado (SEGE) reconoció insuficientes los esfuerzos para poder dotar de infraestructura necesaria a toda las escuelas que se encuentran en territorio potosino, esto tras el mandato judicial que ordena a la SEGE realizar un estudio técnico para verificar las condiciones de la escuela primaria “José María Pino Suárez” en el municipio de Soledad de Graciano Sánchez, donde los niños reciben su instrucción bajo pésimas condiciones.
Al respecto el titular de la dependencia Joel Ramírez Díaz aseguró que como autoridad están obligados en atender estas necesidades independientemente de los criterios que se apliquen para los planteles sean cada vez más dignos y confortables, por lo afirmó que atenderán esta instrucción que mandata una autoridad para que este plantel en particular sea atendido lo más pronto posible.
“El estado está haciendo un gran esfuerzo como nunca en la historia, se han arreglado un promedio de seis de cada 10 escuelas de las 5 mil 300 de educación básica que hay, pero hay lugares como Tamazunchale, Aquismón y Matlapa, en donde se han hecho mejoras de infraestructura o equipamientos casi en su totalidad… se trata de un esfuerzo sin precedentes, pero nunca será suficiente lo que se ha hecho porque siempre habrá escuelas con deterioro y el crecimiento poblacional de la matrícula demanda más espacios”, sostuvo el funcionario.
Cabe recordar que la organización civil Renace promovió un juicio de amparo indirecto para que decenas de niñas y niños de la localidad de San José del Barro en el municipio de Soledad de Graciano Sánchez, que se encuentran en situación de vulnerabilidad, puedan acceder a una escuela digna, situación que fue valorada por la autoridad judicial.
El espacio no con los servicios básicos para operar como es el caso del agua. Los baños son letrinas, las áreas recreativas de terracería, algunos de los pisos son de cemento, las paredes están plagadas de grietas y cuarteaduras, el pozo está inservible y rodeado de maleza, entre otras condiciones, que ponen en riesgo la integridad física de las niñas y niños.
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apl