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La incertidumbre reina entre los padres de familia, tanto de la secundaria técnica número 1, mejor conocida como ETI, y la primaria Tipo 21 de Agosto.
Por segundo día, maestros y alumnos de la primaria Tipo 21 de Agosto, salieron a las calles y bloquearon Mariano Jiménez en inconformidad por la posible reubicación del alumnado de estos planteles ante la consolidación de la Universidad Rosario Castellanos que se albergaría en estos espacios de forma conjunta con el Centro de Alto Rendimiento.
Tras bloquear las vialidades, padres de familia se reunieron con el secretario de Educación, Juan Carlos Torres, sin embargo, sostuvieron que “no aportó soluciones claras” al conflicto que enfrenta la institución.
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“Nos dio puro atole con el dedo”, afirmó Fátima Valeria, tesorera de la mesa directiva de padres de familia de la escuela.
La madre de familia en entrevista para EL UNIVERSAL San Luis Potosí explicó que se reunieron y el secretario los escuchó, pero no resolvió nada.
“No tenía propuestas, un plan de trabajo, nada. Nosotros le dijimos todo y sí nos escuchó, pero no resolvió absolutamente nada”, comentó.
Asimismo, subrayó que los niños están tristes, algunos incluso salen llorando porque están preocupados por su escuela ya que escuchan las noticias y se dan cuenta de lo que está pasando.
También dijo que la preocupación de los padres radica en la posible reubicación o cierre de la escuela.
“Nunca se nos notificó nada oficialmente. Todo lo que sabemos lo hemos visto en internet, cuando empezamos a sospechar, decidimos alzar la voz y defender nuestra escuela”, explicó.
La primaria Tipo 21 de Agosto, con 116 años de historia y 515 alumnos inscritos, es considerada un referente educativo en la zona.
“Aquí se trabaja muy bien. Académicamente somos fuertes, y también destacamos en lo deportivo. Además, contamos con una plantilla completa de maestros comprometidos con la educación de nuestros hijos”, detalló la tesorera.
También argumentó que los niños han tenido clases normales, con horarios normales.
“No vamos a dejar que los borren como si nada. Esta escuela tiene más de un siglo de servicio, y funciona bien. No es un tema de números ni de rendimiento, es una comunidad que merece respeto”, concluyó Fátima.
