San Luis Potosí ocupa el quinto lugar nacional en consumo de alcohol en la población de 10 a 19 años con el 29.3 por ciento, según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2018 (Ensanut), publicada por el Inegi.
De acuerdo al estudio referente al año 2018, la entidad potosina se encuentra solo por debajo de Puebla (30.8%), Colima (30.3%), Ciudad de México (29.5), Morelos (29.5%) y con un consumo mayor a estados como Jalisco (29.1%), Zacatecas (26.6%), Michoacán (26.3%), Guanajuato (26.2%) y Querétaro (25.5%).
El Bajío mexicano es una de las zonas del país en donde más se observa el consumo de alcohol y tabaco en población infantil y juvenil.
En cuanto a la población de 20 años y más que ha consumido alcohol diaria o semanalmente, la entidad potosina vuelve a los primeros lugares en el top 10 de las entidades que mayor consumo presentan: Chihuahua (27.0%), Zacatecas (25.7%), Coahuila (25.6%), Yucatán (25.6%), Colima (23.5%), Sonora (22.7%), San Luis Potosí (22.6%), Baja California Sur (22.3%), Nuevo León (21.8%), Durango (21.4%), Campeche (20.7%), Querétaro (20.2%) y Jalisco (20.2%).
De acuerdo con la Ensanut, 21.7 por ciento de la población de 10 a 19 años del país ha tomado. Por sexo, 42.8% de los hombres sí ha consumido bebidas alcohólicas y en el caso de las mujeres, 13.8%.
Mientras que la distribución porcentual de la población en el país de 20 años y más por condición de consumo de alcohol y frecuencia de consumo según sexo arrojó que 63.8% sí ha tomado; y en hombres el porcentaje llega a 80.6% y en las mujeres a 49.9%.
En 2018 en el país tomaron diario 1% de las mujeres y 5.7% los hombres; semanal: mujeres (9.5%), hombres (30.2%); mensual: mujeres (8.1%), hombres (14.8%); ocasionalmente: mujeres (75.9%), hombres (47.0%); no respondió: mujeres (5.5%), hombres (2.3%).
En población de 10 a 19 años, los estados con mayor consumo de tabaco son: Guanajuato (9.5%), Ciudad de México (8.2%), Aguascalientes (7.9%), Hidalgo (7.9%), Sonora (7.7%), Nuevo León (7.3%), Jalisco (7%), Coahuila (6.7%) y Querétaro (6.5%).
En México, el consumo de tabaco ocasiona más de 60 mil muertes al año. Además, impacta negativamente la economía familiar e implica pérdida de productividad laboral, mortalidad prematura y elevados costos para el sector salud.
apl