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“No es por correrlos… pero ojalá que ya se vayan”, sostuvo el gobernador Ricardo Gallardo Cardona al referirse a la empresa canadiense Minera San Xavier, la cual a 10 años de anunciar su cierre de operaciones sigue sin retirarse completamente de San Luis Potosí, además de dejar un desastre ecológico y prácticamente ningún beneficio económico al estado.
El mandatario sostuvo que ese tipo de empresas son las que le han hecho mucho daño a San Luis Potosí y al país.
"No son empresas que vinieron a generar empleos o a generar una derrama económica, como lo estamos viendo ahora en la zona industrial o en el tema comercial, simplemente son empresas que llegaron, explotaron nuestro suelo, se llevaron el oro y la plata, se llevaban más de cinco mil millones de dólares por año”, criticó.
Insistió en que lo peor es que no dejaron siquiera una mínima derrama económica al propio municipio de Cerro de San Pedro, lugar donde operaba, y no le pagaban si quiera ni el predial.
“Fue una tontería que la maldita herencia permitiera eso, que permitieron los gobiernos federales pasados, pero pues eso es porque seguramente eran socios”, señaló.
Gallardo Cardona urgió a que “ojalá y ya se fueran” porque no han dejado nada bueno al estado y aseveró que si tuvieran la intención, por lo menos deberían acercarse a pagar los impuestos que le deben al estado y a los municipios, así como también remediar la afectación ecológica que realizaron.
Recordó que incluso impactaron de forma ilegal terrenos de Soledad de Graciano Sánchez y cuando él era alcalde de ese municipio se les hizo el reclamo de que pagaran la afectación, incluso se enviaron cartas diplomáticas a Canadá “y les valió madre”.
Finalmente indicó que el presidente Andrés Manuel López Obrador tiene muy presente este caso y por ello ha estado gestionando algún tipo de sanción para la empresa por parte del gobierno federal, además de que se requiere la actuación enérgica por parte de Profepa y Semarnat en el sitio, pues “en realidad ya se tardaron”.
Cabe destacar que la Minera San Xavier es una subsidiaria de la canadiense New Gold Inc. la cual se instaló en el municipio de Cerro de San Pedro en 1995 y comenzó una explotación de tajo a cielo abierto que acabó precisamente con el cerro que le dio nombre al municipio y que aparece en el escudo de armas del estado potosino.
Asimismo acarreó diversas denuncias por el daño ecológico grave que ocasionó a la tierra y a los mantos acuíferos, en 2020 anunció su cierre de operaciones y un plan de remediación que culminará presuntamente en enero del 2024.
