Debido al recorte presupuestal en San Luis Potosí, nos cuentan, 2021 no se ve con buenos ojos, pues ya se afila la guillotina para desde enero iniciar con el despido de personal en varias dependencias estatales, sobre todo en el personal de confianza, porque a los sindicalizados prácticamente no los pueden tocar. Nos comentan que la guillotina también se prevé que pase por los poderes Judicial y Legislativo del estado, aunque en este caso cada vez son más las voces que les exigen a los diputados locales analizar la permanencia de sus asesores, pues resultan ser grupos muy numerosos, caros y en ocasiones poco efectivos, pero al parecer “hacen como que la Virgen les habla”.
En Nuevo León, nos platican, tal parece que nació muerta la alianza opositora de PRI, PAN y PRD que buscaría frenar a Morena y Movimiento Ciudadano en el estado, pues a pesar de que el dirigente priista Alejandro Moreno Cárdenas hasta buscó el espaldarazo de la cúpula empresarial, los panistas le sacaron la lengua y dieron un “no” rotundo, porque no perdonan que les hayan quitado las alcaldías de Guadalupe y Monterrey, por lo que ahora quienes podrían vender caro su amor serían los perredistas, pues a pesar de que perdieron su registro en el estado, dicen que aunque sean poquitos saben hacer mucho ruido y ser la diferencia para unos u otros. ¡Qué tal!
Quien sorprendió en la tribuna del Congreso de Yucatán, nos platican, fue la diputada Leticia Euán Mis (Morena), pues no había hecho uso de la palabra; sin embargo, ahora que tomó el micrófono fue para dar un “ya basta” y exhibir a sus tres compañeros de bancada, así como al dirigente local del partido, Mario Mex Albornoz, por violencia política de género, pues aseguró que ha sido marginada de los acuerdos a los que llegan y no es tomada en cuenta en las decisiones del partido, por más que ha intentado abrir un diálogo para acabar con esa situación. Nos dicen que doña Leticia acusó que detrás de eso están “caballos de Troya de piel morena y sangre azul”, por lo que más de uno se quedó con la boca abierta y preguntándose: ¿hay problemas en el paraíso?
Otra dama que está en problemas de violencia política en Sinaloa, nos comentan, es la presidenta de la Junta de Coordinación Política del Congreso local, Graciela Domínguez Nava (Morena), pues asegura que ha sufrido descalificaciones, incluso con palabras altisonantes. Nos indican que la mano que mece la cuna podría ser la del alcalde de Culiacán, Jesús Estrada Ferreiro, porque es un secreto a voces su enemistad y siempre que puede la tilda de deshonesta, pues no le perdona que en 2018 se rechazara su iniciativa para modificar las tablas catastrales y, aunque en otras ocasiones han salido varios a dar la cara por doña Graciela, ahora con ambiente electoral parece que la dejarán sola.