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El 16 de septiembre, además de celebrarse la Independencia de México, existe otra importante efeméride para la capital de San Luis Potosí, ya que es el inicio de la construcción de uno de sus más emblemáticos edificios. Un día como hoy, pero de 1889, fue la colocación de la primera piedra del Teatro de la Paz.
Su construcció duró aproximadamente cinco años y fue inaugurado el 4 de noviembre de 1894. El arquitecto que le dio vida a este impresionante edificio fue José Noriega, quien decidió construir el recinto con influencias de la arquitectura francesa y el arte neoclásico, con su fachada en cantera rosa.
Anteriormente, el lugar que ocupaba el Teatro de la Paz fue una parte del Convento del Carmen, la cual, mediante la aplicación de las Leyes de Reforma, después fue destinada para una cárcel.
Durante su existencia, el teatro ha sido sometido a varias remodelaciones. Entre 1944 y 1949, su interior fue totalmente remodelado por los arquitectos Francisco Cossío e Ignacio Algara, así como por el ingeniero Flavio Madrigal.
Su última renovación fue en el 2018, en la cual se centraron en una restauración de partes externas del recinto como la cúpula y piezas de cantera dañadas en la fachada principal.
Debido a su arquitectura y a que, a lo largo de su historia, ha sido escenario de diversos y grandes espectáculos artísticos, ha sido reconocido por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) como parte del Patrimonio de la Humanidad de San Luis Potosí.
Además de este nombramiento y que a nivel nacional sea reconocido como uno de los cuatro teatros más importantes de la República, para la capital potosina, este edificio representa un ícono histórico y cultural.
Este año, cumple 134 años de historia, por lo que se espera, como en todos los años, una serie de espectáculos que conmemoren su existencia.
