María Pons Nicoux de Degetau nunca imaginó que su emprendimiento facilitaría a los mexicanos la elaboración de uno de los platillos más tradicionales y exquisitos del país; su idea de envasar el alimento generó el nacimiento de la famosa marca Mole Doña María.
La potosina ganó fama por preparar el tradicional mole artesanal en la cocina del Hotel Progreso, uno de los más prestigiosos de San Luis Potosí en la década de 1950.
Cada que había banquetes familiares se le pedía a Doña María hiciera este platillo, por lo que en una fiesta se le convenció de vender su mole.
Pons Nicoux de Degetau decidió envasar su mole artesanal de manera muy básica; pero su producto era tan famoso que no sólo lo vendía en San Luis Potosí, también lo pedían en los principales restaurantes de Monterrey y Tampico.
El incremento de las ventas la obligó a construir una pequeña fábrica en una casona en el centro de la ciudad y a constituir la empresa Productos Marpe S. A., nombre que deriva de fusionar los nombres Doña María y Don Pedro, su esposo.
Esta pequeña empresa generó cientos de fuentes de empleo a las familias potosinas, quienes emocionadas vieron el crecimiento de la marca potosina y cómo en pocos años traspasó fronteras.
El nacimiento de la marca oficialmente fue en 1955, cuando cambió las instalaciones de la empresa, modificando también su razón social a Productos Doña María, S. A.
Y no fue hasta 1970 cuando vendió la empresa a su sobrino, Don Enrique Hernández Pons, dueño de Grupo Herdez, y al día de hoy el Mole Doña María es uno de los productos más importantes en la historia de San Luis Potosí.
La compañía mexicana sostiene que el mole se elabora con su receta original con ingredientes 100% mexicanos y su forma tradicional de elaborarlo, de esa manera les ahorra tiempo en la cocina a las personas.
Pons Nicoux de Degetau falleció en 1974, pero su legado sigue.
El edificio que fue la sede original de la compañía aún está en pie.
Se ubica a un costado del templo del barrio de Santiago; la empresa la usa como oficina de reclutamiento.
Su producción anual es de 10 mil toneladas de mole; lo que representa entre el 20 y 25 por ciento del mole que se comercializa en el mercado total de mole que hay en México cada año.
Además de la receta original, Doña María elabora los siguientes tipos:
Además de su sabor, una característica del Mole Doña María es su envase.
No se tiene claro el motivo para venderlo en el tradicional vaso de cristal, pero sin duda es un valor agregado de la marca.
Las familias agradecen este detalle ya que al consumir el alimento, este envase se usa para servir bebidas o incluso para colocar veladoras.
Herdez consintió en 2018 a sus consumidores cuando lanzó una edición especial del mole contenido en vasos decorados coleccionables.