En el corazón de la ciudad de San Luis Potosí, específicamente en la esquina de Avenida del Potosí y Alaquines, en la colonia Lomas Primera Sección, se encuentra una de las construcciones más peculiares del estado: una casa circular, metálica, y con un diseño tan inusual que ha sido apodada por los habitantes como la “casa platillo” o “casa ovni”.
Su apariencia ha generado todo tipo de teorías, comparaciones y mitos urbanos desde hace décadas.
Aunque su forma recuerda inevitablemente a un objeto volador no identificado (OVNI), esta construcción no fue diseñada con la intención de parecer una nave extraterrestre.
Según diversas fuentes locales, fue edificada en los años 70 por encargo del reconocido oftalmólogo Alejandro del Sol. La autoría del diseño se atribuye al ingeniero Madrigal y la construcción estuvo a cargo de Norberto Hernández.
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Lo curioso es que, al observar desde una vista aérea, su forma revela una semejanza más precisa con la de un ojo humano, específicamente el iris.
Este detalle, relacionado directamente con la profesión del dueño original, ha llevado a pensar que el diseño fue una metáfora visual de su especialidad médica. Sin embargo, para muchos potosinos, sigue siendo simplemente “la casa ovni”.
Pese a su ubicación en una zona residencial, la casa siempre ha estado rodeada de rumores. Desde que fue construida, su apariencia futurista ha capturado la atención de quienes pasan por ahí.
Algunos aseguran que está deshabitada, otros que se ha rentado en ocasiones —con cifras que han rondado los 80 mil pesos mensuales, según reportes de 2023—, pero no existe documentación oficial que aclare su uso actual.
Tampoco figura como patrimonio histórico o edificación protegida, pero su valor visual y simbólico ha sido reconocido por la comunidad arquitectónica de San Luis Potosí como un ejemplo de arquitectura no convencional.
Aunque esta casa es un caso emblemático para la ciudad de San Luis Potosí, no es la única construcción con diseño “extraterrestre” en el país. En lugares como Campeche, Atlixco, Saltillo, Morelia y Tamaulipas también existen edificaciones con forma de platillo volador. Algunas fueron pensadas como esculturas, otras como residencias o incluso centros comerciales.
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En particular, en la Sierra de San Miguelito, también en San Luis Potosí, hay registros desde los años 80 de una supuesta “base OVNI” documentada por medios locales y exploradores urbanos.
Aunque se trata de otro tipo de estructura abandonada en el desierto, este contexto ha ayudado a mantener viva la relación entre la ciudad y los mitos sobre extraterrestres.
Pese a que no hay demasiada información pública sobre su historia completa, lo cierto es que esta casa se ha ganado un lugar en el imaginario colectivo potosino. Ya sea por su forma de ojo, de nave espacial o de escenografía de ciencia ficción, sigue siendo una de las construcciones más enigmáticas del estado.
Más allá de su misterioso aspecto, la “casa platillo” se ha convertido en un punto de referencia visual para la ciudad. Es una mezcla de arte, simbolismo médico y estética futurista que no deja indiferente a nadie.
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La próxima vez que pases por Lomas Primera Sección, mira hacia el cielo o hacia esta casa. Nunca sabes si estás viendo una residencia o esperando que despegue.