Un oasis entre cerros, así es la cascada El Salto ubicada en el Pueblo Mágico de Santa María del Río, cuna del rebozo y las tradicionales campechanas elaboradas por las mejores panaderías de la región.
Este paraje natural, capricho de la naturaleza por su gran belleza, también es conocido por sus pobladores como la cascada del Señor del Amparo.
Se ubica en medio de cerros áridos, cuyo silencio a su vez se perturba por el sonido del agua en picada, la cual permite la formación de una poza que permite al visitante aventarse un chapuzón o bien para sentarse en su orilla y refrescarse.
Para acceder a este sitio desde la plaza principal del municipio se debe recorrer la calle Manuel José Othón durante aproximadamente 6.5 kilómetros, de los cuales los primeros dos atraviesan la mancha urbana de la cabecera municipal.
Después de 20 minutos en el camino hay una desviación con dirección a la capilla del Señor del Amparo, se debe recorrer hasta topar con el puente El Arquito. A partir de ese punto el último tramo debe ser a pie, siguiendo el camino sobre el río; la caminata es sencilla e intuitiva.
Durante el sendero es posible disfrutar de un panorama árido donde sólo habita la vegetación propia de este tipo de suelo, pero también es posible encontrar la formación de algunos riachuelos.
Después de unos minutos de camino será posible encontrar una formación rocosa que permite una caída de agua, un oasis entre la tierra y cerros secos.
Se recomienda llevar consigo alimentos propios, cilindros para hidratarse y para mayor comodidad es necesario portar un sombrero o gorra para protegerse del sol, llevar ropa de colores claros, así como bastones de senderismo, bloqueador solar y un teléfono celular cargado.
Es importante que los visitantes sean responsables y no realicen fogatas, también es necesario recoger los desechos o envolturas de alimentos después de haberlos consumido en el lugar para ayudar a la preservación de estas áreas naturales.