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En la capital potosina, uno de los negocios de tamales huastecos más reconocidos por su excelente sabor son los del Tío Vikingo. La gente los reconoce por ser los que “están atrás de la Terminal Terrestre Potosina (TTP)” y, de esta manera, lo recomiendan a familiares y amigos.
En entrevista para EL UNIVERSAL San Luis Potosí, Irving Oliver López Hernández contó que sus padres, el señor Cándido López Mendoza y la señora Socorro Hernández Sánchez fueron quienes comenzaron el negocio un 14 de febrero del año 2000, hace 23 años.
Provenientes de Ciudad Valles, Irving detalló que el mudarse a la capital potosina no fue tarea fácil en cuanto al ámbito económico, por lo que a veces la señora Socorro hacía tamales en agradecimiento a los vecinos que le cuidaban a sus hijos. Fue debido al elogio constante que recibía acerca de su platillo, que los señores Cándido y Socorro decidieron renunciar a sus trabajos y emprender un negocio.
Como el señor Cándido trabajaba de operador de camiones en la TTP, Irving contó que sus primeros clientes fueron otros operadores y, a partir de ahí se fueron haciendo de más comensales y el negoció creció poco a poco.
¿De dónde surgió el nombre Tío Vikingo?
Irving señaló que el nombre del negocio se dio de forma muy curiosa y no fue planeado. La parte de “Tío” surgió porque al inicio del emprendimiento los sobrinos del señor Cándido también trabajaban ahí y siempre le gritaban “tío” al preguntarle algo, por lo que los clientes lo comenzaron a ubicar con ese nombre y, de hecho, lo llaman así hasta el día de hoy.
En cuanto a “Vikingo”, el apodo se formó cuando el señor Cándido trabajaba de operador, puesto que sus compañeros al verlo rubio y con barba le empezaron a decir de esa manera.
Tamales Tío Vikingo, un negocio familiar que le ha dado trabajo a los potosinos
Este negocio comenzó siendo un emprendimiento entre familiares, pero al expandirse la clientela y la demanda contrataron personal para el área de producción y de atención al cliente.
“Tenemos ya alrededor de 20 a 25 personas que elaboran en producción y otras siete u ocho personas que nos dedicamos a la venta. En este caso, pues yo me dedico a lo que es a la venta, o sea, me vengo aquí al punto al punto de venta y otras personas que se encargan de lo que son las compras y todo eso ya es una empresa este, pues distribuida.”
Irving, reveló que al día se venden unas 3 mil o 4 mil piezas de tamales y que, justo ahora, es la fecha en la que más tienen demanda: en diciembre, por las posadas y hasta febrero, por el día de la Candelaria.
¿Qué puedes encontrar en los Tamales Tío Vikingo?
Además de los tamales huastecos en hoja de plátano (de lomo en salsa de chilpan, costilla verde, pollo verde, lomo rojo, pollo verde, rajas con queso y picadillo) Irving contó que han expandido el mercado con tamales en hoja de maíz (lomo, pollo, costilla, rajas, picadillo, vegetales, frijol, chicharrón, zarzamora, piña, durazno y coco), debido a la demanda de la gente.
“Aceptamos recomendaciones. Por ejemplo, en temporada o fechas que no se come carne hacemos unos tamales de camarón con chile chipotle, queso asadero y cebolla morada y le vamos a modificando (…) para ver cuál les gusta y seguir este innovándonos.”
Es tanto el éxito de estos tamales que Irving comenta que, por día, llegan 2 o 3 nuevos clientes preguntando si estos son los tamales de “atrás de la Central”. Estos, los puedes encontrar en avenida industrias #250 en la colonia Capricornio, a partir de las 6:30 de la tarde aproximadamente.
