El Barrio de Tequisquiapan o Tequis, como mejor se le conoce, es uno de los ocho barrios originarios de la ciudad de San Luis Potosí, fundado en 1597 sobre asentamientos guachichiles y tlaxcaltecas.

Su nombre tiene origen náhuatl y significa lugar sobre el río del tequesquite y alude a los manantiales que mantenían tierra fértil, ya que a finales del siglo XVI el barrio era caracterizado por ser una zona fértil llena de agua.

Con el paso del tiempo, el barrio de Tequis se transformó en zona de descanso para familias acaudaladas, mientras su línea de tranvía, primero de caballos y luego eléctrica, marcaba su elegancia.

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En el siglo XIX sus casonas porfirianas eran consideradas las más distinguidas. Hoy solo queda el Museo Francisco Cossío, una ex quinta convertida en bien cultural.

Foto: Jazmín Ramírez EL UNIVERSAL
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Así mismo el barrio cuenta con su emblemático Jardín que tiene al centro el Monumento a la Madre, traído de Italia y fabricado con cantera y mármol blanco.

Foto: Especial
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El barrio también cuenta con su parroquia dedicada a la señora de los remedios y la celebran cada 15 de septiembre con misas, kermés, antojitos y fuegos artificiales.

Actualmente se puede observar alrededor de la iglesia y el jardín diversos puestos de comida y bebida en dónde las familias suelen ir a comprar, mientras dan un paseo en el jardín.

Foto: Jazmín Ramírez EL UNIVERSAL
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El Barrio de Tequisquiapan es un testigo vivo de la historia potosina: desde su origen como huerto ancestral, hasta su resurgimiento como espacio cultural y gastronómico.

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