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El municipio de Tanlajás en la Huasteca Potosina se prepara para celebrar uno de los rituales más importantes para su comunidad, se trata la toreada de diablos durante la Semana Santa, tradición mística con más de 200 años de antigüedad.
La toreada se vive mediante una danza en la que se enfrentan el bien y el mal, en este caso el mal toma vida a través de quienes portan la máscara artesanal de diablo, mientras que el bien puede ser cualquier cristiano que busca lavar sus pecados.
La danza inicia la noche del miércoles de la semana mayor, al ritmo de la música, el cuerpo del bien comienza a reprender al diablo mediante palazos en la máscara, a la par, el diablo intenta defenderse con su chirrión en mano haciéndolo sonar por todo su alrededor.
El ritual ancestral cuenta con la participación exclusiva de hombres que mediante este duelo buscan reivindicarse por las faltas cometidas a lo largo del año.
Foto: Especial
La toreada de diablos llega a su fin el domingo de resurrección con la lectura del testamento, se acompaña también con una herencia chusca que deja el diablo elaborada en forma de rima o copla, al término se hace la quema del diablo, un muñeco o piñata relleno de aserrín y cohetes.
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Toreada de diablos para el mundo
La Secretaría de Turismo inició la proyección de este místico ritual en la Huasteca Potosina. Se prevé que más de 20 mil visitantes locales, nacionales y extranjeros arriben en Semana Mayor.
Foto: Especial
Con la consigna de proyectar a nivel nacional, la Sectur coordinó la jornada de videograbación en conjunto con autoridades municipales por representar un atractivo para el disfrute de las y los turistas.
Tras dos años de no realizarse debido a la pandemia, esta costumbre del pueblo huasteco regresa con más fuerza a Tanlajás, sitio en el que se prevé el arribo de alrededor de 20 mil personas entre el 13 y 17 de abril por periodo de Semana Santa, quienes atraídas por los festejos y celebraciones generarían una derrama económica importante al reactivar el comercio local, el servicio en restaurantes y la ocupación en los seis hoteles del municipio, que registran hasta el momento el 75 por ciento de reservaciones.