Más de San Luis

Túnel de Ogarrio en Real de Catorce: Misterios de la famosa entrada al Pueblo Mágico de SLP

Recorre el Túnel Ogarrio y vive la esencia de Real de Catorce: arquitectura colonial, rutas escénicas, leyendas y el misticismo de Wirikuta

Foto: Lugares Turísticos de México.
26/11/2025 |11:48
Fabiola Hidalgo
Redactora en los sitios regionales de EL UNIVERSALVer perfil

El viaje para visitar el emblemático Pueblo Mágico de Real de Catorce, San Luis Potosí, comienza mucho antes de poner un pie en sus calles empedradas.

La verdadera puerta de entrada es el , una obra monumental que desde hace más de un siglo provoca asombro, preguntas y un inevitable sentido de aventura. Para muchos viajeros, cruzarlo es uno de los momentos más emocionantes de la ruta hacia este antiguo mineral convertido en destino turístico y espiritual.

Foto: Yo Amo Catorce.

Un coloso subterráneo que cambió la historia del Altiplano

El Túnel Ogarrio no solo es el acceso principal a Real de Catorce: es la pieza de ingeniería que permitió su desarrollo minero y su conexión con el resto del país. Construido entre 1897 y 1898 —aprovechando un viejo socavón minero— su inauguración oficial llegó en 1901.

Diversas fuentes históricas señalan que su longitud oscila entre 2 mil 279 y 2 mil 720 metros, aunque la cifra más aceptada es de aproximadamente 2 mil 300 metros. Para la época del , esta excavación monumental lo posicionó como uno de los túneles más largos de México.

Lee más:

La obra dirigida por Manuel Baranda y atribuida en gran parte al constructor Vicente Irizar, el túnel fue una proeza impulsada por la familia minera De la Maza y Gómez de la Puente. Su construcción transformó lo que antes se conocía como un “nido de águilas”: un sitio de difícil acceso que finalmente quedó comunicado con la rica zona minera de Santa Ana.

Cargando contenido...

La inauguración que marcó una época

El 2 de abril de 1901, Real de Catorce vivió un día inolvidable. Multitudes se reunieron desde temprano en el cerro de San Agustín para presenciar la inauguración del túnel. Entre música, discursos y decoraciones especiales, el gobernador Blas Escontría atravesó el túnel en un tranvía tirado por mulas, adornado con banderas mexicanas y españolas.

Tras el recorrido, la celebración continuó con banquetes, serenatas en el Jardín Hidalgo y una atmósfera de optimismo que simbolizaba el auge minero del . A partir de entonces, los tranvías de tracción animal circularon diariamente por el túnel, transportando mercancías, mineros y viajeros.

Te interesa:

Foto: AMITOS.

De pasadizo minero a experiencia turística imprescindible

Hoy, más de cien años después, el Túnel de Ogarrio mantiene su función original: sigue siendo el acceso principal al Pueblo Mágico. Los visitantes esperan su turno en el punto conocido como , mientras observan puestos de artesanías y sienten cómo la expectativa crece conforme se abre el paso.

Cruzar el túnel es una experiencia única. Sus paredes de roca, su luz tenue y su extensión imponente generan una sensación que combina historia, aventura y misterio.

Al salir, el visitante se encuentra de golpe con la magia del Real: caminos empedrados, construcciones coloniales, montañas áridas y un ambiente cargado de leyendas.

Foto: Yo Amo San Luis.

El Real de Catorce más allá del túnel

Una vez del otro lado, el viajero puede recorrer un pueblo detenido en el tiempo. Entre sus imperdibles están la parroquia de la Purísima Concepción, la Plaza Hidalgo con su kiosco porfiriano, la Casa de Moneda —hoy centro cultural—, el palenque y la Plaza de Toros. Para los amantes de la fotografía, cada esquina ofrece postales inigualables.

Lee más:

El lugar también es célebre por su conexión espiritual. Desde hace siglos, los huicholes han peregrinado a , considerado el sitio donde nació el sol. Muchos visitantes actuales llegan en busca de experiencias místicas, una tradición que cobró fuerza desde los años sesenta con el turismo alternativo y que hoy convive con viajeros de todo tipo.

Foto: Yo Amo Catorce.

Aventuras entre montañas: caballos y Willys

El túnel es solo el principio. Las clásicas camionetas Willys llevan a los viajeros por rutas panorámicas hacia el Cerro del Quemado, las antiguas haciendas o el Pueblo Fantasma. Otra opción es recorrer el entorno a caballo junto a los caballerangos locales, quienes conocen cada rincón, historia y leyenda del mineral.

Túnel de Ogarrio, Real de Catorce, San Luís Potosí. Foto: Gobierno de México.

Un ícono vivo del pasado y del presente

El Túnel de Ogarrio es mucho más que un acceso carretero: es el símbolo que conecta la grandeza minera del Real de Catorce con su actual vocación turística. Cada visitante que lo cruza revive, aunque sea por un instante, el eco de los tranvías de mulas, la algarabía de su inauguración y el espíritu indómito que siempre ha caracterizado al Altiplano Potosino.

* Con información de Rafael Montejano y Aguiñaga, del libro “Real de Catorce. El Real de Minas de la Purísima Concepción de los Catorce, S.L.P.”

Te recomendamos