Si no sucede ningún inconveniente, los vehículos podrán circular por los nuevos brazos del distribuidor vial “Benito Juárez” entre agosto y septiembre del próximo año, esto de acuerdo a información de la Junta Estatal de Caminos (JEC), entidad que está ejecutando la obra para la cual se tienen previstos 540 días naturales a partir del 2 de febrero que iniciaron los movimientos de tierra.
Estructuralmente se trata de una “Y” unida con una “herradura” que se conecta al brazo que actualmente unen a la carretera de Matehuala con la avenida Salvador Nava en sentido norte- sur, la vialidad tendrá más de un kilómetro de longitud, 1240 metros para ser exactos, sostenida con tres estribos y 53 pilas, llegando hasta un poco más de 21 metros de altura en su sector más elevado.
Es una obra de ingeniería de tal magnitud que se ha requerido de tres constructoras que trabajarán de manera coordinada Sánchez Valdez Construcciones S. A. de C. V., Maquinaria y Renta de Zacatecas S. A. de C. V. y Santos Chisum S. A. de C. V. , con una inversión de más de 218 millones 534 mil pesos.
Se trata apenas de una de las primeras acciones que se ha trazado la administración estatal, para poder desahogar el cuello de botella en el que se ha convertido la carretera a México por el tránsito vehicular entre la mancha urbana y la zona industrial, al permitir el paso elevado con rampas desde la carretera a Rioverde y desde la propia 57 hacia el distribuidor para unirse al ramal que desciende sobre la avenida Salvador Nava Martínez.
Cabe destacar que de acuerdo a la propia JEC, aún no se cuenta con un plan de vías alternas o auxiliares para el momento en que se empiecen a cerrar carriles en la parte baja del distribuidor, sin embargo, se asegura que por el momento no son necesarias, ya que se están llevando a cabo primero trabajos que no requieren el cierre de carriles en esta primera etapa, al menos durante los primeros cinco meses.
vkc
