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El magistrado presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado (STJE), Juan Paulo Almazán Cue, aclaró que la puesta en libertad del hijo del jefe de operaciones de la Policía Estatal, luego de ser detenido por presunto robo a casa habitación, no quiere decir que esté libre de toda culpa, sino que se trata de un delito que no amerita prisión preventiva oficiosa y puede seguir su procedimiento en libertad.
Almazán Cué refirió: “el robo domiciliario no tiene como consecuencia necesaria la prisión preventiva y hay sus excepciones, en audiencia los interesados tendrían que haber justificado por diversas circunstancias como pudiera haber sido la reincidencia o que no contara con un domicilio conocido en la entidad para que se le hubiese dictado una prisión preventiva, pero al parecer no fue así”.
El presidente del Poder Judicial del Estado manifestó de igual forma, que se tendría que revisar la audiencia, pero al no ser una consecuencia inmediata porque el nuevo sistema de justicia no es un sistema de “prisiones y libertades”, sino un sistema de reparación del daño, se salvaguardan varios principios, comenzando por la presunción de inocencia.
Indicó que de cualquier forma siempre hay una libre decisión del juez de la causa, de acuerdo al contexto y de cómo se vaya desarrollando la audiencia, pero si es un hecho que pudiera seguir su proceso detenido, la Fiscalía debió haber presentado datos de prueba que demostraran que era la medida cautelar adecuada.
Finalmente, cuestionado sobre la doble nacionalidad de esta persona, que al parecer cuenta también con la nacionalidad estadounidense, indicó que no es un tema de estricta consideración, pero sí se le da vista al consulado de aquel país para que ellos tengan conocimiento del caso.
samuel.estrada@clabsa.com.mx
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