Cubetas, conos, tambos, y hasta mesabancos se usan en el Centro Histórico para apartar espacios de estacionamiento, los responsables de ello en su mayoría son los franeleros, que se han apoderado de estos espacios.
"Hasta tiene uno miedo de estacionarse y no aceptar el trato que ellos tienen, por miedo que le hagan algo al carro, porque si no va a ocupar uno su servicio no se puede estacionar, ese es el problema con los franeleros", relató un automovilista en busca de un lugar.
apl