El titular de la Junta Estatal de Caminos (JEC) Marcos Enrique Rosales Vega, reiteró que no habrá sanción adicional para el consorcio constructor de los nuevos brazos del distribuidor “Benito Juárez”, más que hayan corrido con todos los gastos de los lesionados y tener que rehacer la parte que se derrumbó el viernes pasado y provocó alarma entre la ciudadanía.
Subrayó que este incidente se debió a la falla de algún elemento de la cimbra del cabezal al momento del colado que poco a poco se fue flexibilizando (probablemente una pieza de madera) y cediendo ante el peso de la mezcla hasta que se derrumbó completamente, “pero desde ese momento todo ha estado a cargo de la empresa y no se registra ninguna afectación al erario público”.
Explicó que no puede haber una sanción ahora porque no está estipulado en el contrato, en el mismo se especifica un precio unitario sobre la obra terminada, “si el desperfecto hubiese ocurrido una vez que ya se entregó la obra pues entonces si hubiera ameritado alguna sanción incluso de carácter penal, pero mientras no sea así, el consorcio constructor tiene la oportunidad de enmendar su trabajo y entregar la obra con la calidad que se le ha pedido”.
Rosales Vega dijo que sin duda un incidente de esta naturaleza pone en alerta a la JEC y que se ha reforzado el control y la vigilancia de la calidad con la que se están desarrollando las obras; en su momento la Contraloría General del Estado decidirá si hacen un análisis particular de la ejecución de este proyecto.
Finalmente recordó que el consorcio encargado de la obra está integrado por las empresas Sánchez-Valdez, Maquinaria y Renta de Zacatecas y Santos Chisum que ya tienen experiencia en muchas obras a nivel nacional, incluyendo puentes vehiculares sin mayor problema “sin duda es una empresa calificada”, actualmente el avance general de la obra es de 41 por ciento y está dentro del calendario previsto.
apl