De 2011 al cierre de 2019 la entonces Procuraduría General de Justicia del Estado, hoy Fiscalía General del Estado (FGE), ha reportado el hallazgo de al menos 22 cuerpos inhumados de manera clandestina -en las denominadas “fosas”- en una decena de municipios del estado, sin embargo, en casi una década no se ha esclarecido ninguno de estos delitos.
Lo anterior de acuerdo a datos que la FGE dio a conocer en respuesta a una solicitud de información, emitida el pasado 15 de enero- en donde se informa, por ejemplo, que las primeras “fosa clandestinas” fueron encontradas hasta el 2011: una en Villa de Arriaga y otra en la capital potosina.
Situación que fue incrementando año con año y disparándose en 2019; luego de 2011 fue hasta 2013 que se volvió a encontrar una en el municipio de Armadillo de los Infante, en 2014 se encontró otra en Santa María del Río, en 2016 de nueva cuenta en Santa María del Río, y para 2017 comenzaron a repuntar, reportándose al menos tres en ese año.
En 2018 solamente se reportó una fosa en Santa María del Río, pero 2019 ha sido completamente diferente porque aunque el número de fosas no ha sido tan grande, si se ha disparado el número de cuerpos puesto que reportaron al menos trece, no obstante, aún no han sido cerradas estas mismas fosas por lo que el número de víctimas podría aumentar aún más.
Cabe destacar que en la mayoría de los casos la FGE clasifica los casos como homicidio clasificado e inhumación ilícita, pero en todos refiere que el estatus es el mismo “bajo investigación”, es decir, que ninguno de estos casos ha podido resolverse ni ser concluido.
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vkc
