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Para muchas familias, la pandemia por coronavirus ha representado inestabilidad económica, por los cierres de negocios e incluso pérdida de empleo, generando incertidumbre, situación que para la familia Sustaita, que desde hace 40 años se dedica a la venta de accesorios y disfraces en el Mercado República, ha sido la constante desde marzo por las bajas ventas.
Con la esperanza de poder vender poco más a lo que se vendió el pasado 16 de septiembre, fecha en la que comerciantes de disfraces consideran la venta es mayor por la importancia del festejo; en un local no mayor a dos por tres metros, dentro del Mercado República, Juan Manuel Sustaita, padre de familia, oferta disfraces, accesorios y trajes conmemorativos a la Revolución Mexicana por el 20 de noviembre.
En entrevista con EL UNIVERSAL San Luis Potosí, comentó que desde el pasado mes de abril, cuando cerraron los mercados municipales de la capital, las ventas no han podido superar el 10% de ingresos, pese a fechas en las que los disfraces se compran más.
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"Ahora en día de muertos, Halloween, sí se movió un poquito más la venta, pero no tanto, te voy a decir: el año pasado vendía hasta 10 catrinas, ahora no se vendió ninguna. Sí se vendieron muchos trajes tipo americano, eso nos ayudó un poco, pero ahorita para el 20 (noviembre) nada, quieren de la cintura para arriba, nada más para la foto de los niños en la escuela, sí se ha vendido pero ni un 10%, de lo del año pasado" aseguró.
Para el local "Disfraces Sustaita", las inversiones para surtir de trajes para el 2020 se realizó antes de la entrada de primavera, es decir, antes del decreto nacional de medidas de distanciamiento social, inversión que no han podido recuperar en su totalidad debido a las escasas ventas.
Entre las acciones que la familia Sustaita ha implementado para sobrellevar gastos de casa, la deuda de inversión y gastos corrientes del local como luz y agua ha sido el empeño de bienes y la venta de una propiedad que tenían, ya que además la afluencia de gente en el mercado ha bajado, aún más desde el pasado 28 de octubre.
"Ahorita no hay recuperación de nada, estamos esperando lo de navidad, lo de nacimientos, y lo que mueve a la gente es la fe, lo que es el traje de niño Dios, los trajes para las pastorelas, pero no podemos pedirle mucho a la gente porque la gente anda muy amolada", precisó.
Pese a que la pandemia ha sido algo que ha cambiado la realidad de la familia, por el bajo ingreso y sustento que lleva Juan Manuel al hogar, recordó que algo similar sucedió en 2001 tras el atentado de las Torres Gemelas en la ciudad de Nueva York en Estados Unidos, ya que ante el temor la gente dejó de realizar más compras que los requeridos en la canasta básica, aunque destacó que dicha crisis en ventas duró sólo un mes.
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"Esto sí está bastante fuerte, y luego ya vamos para un año y luego quién aguanta un año así", señaló.
Con ilusión en sus ojos, hizo un llamado a la ciudadanía, que tiene posibilidades de adquirir alguno de los trajes que oferta, para que preserven las tradiciones familiares aunque sea desde casa y pueda vestir a sus hijos para realizar dinámicas familiares para conmemorar las festividades decembrinas y así poder llevar un ingreso mayor a casa en vez de lo justo para sobrellevar las deudas que les ha dejado la pandemia por Covid-19.
