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A tres meses de que la Asamblea Legislativa avaló la creación de la Agencia de Atención Animal de la Ciudad de México se desconoce cuál será su intervención específica para combatir el robo de animales de compañía, a pesar de que éste va al alza en la capital.
Tan sólo en los últimos cuatro años el robo de perros y otros animales se incrementó, pues las cifras señalan que por lo menos cada mes entre nueve y 10 mascotas fueron sustraídos de sus dueños.
Cifras de la procuraduría capitalina refieren que de enero a octubre de 2017 los delincuentes se llevaron 107 animales, en 2016 fueron 115, en 2015 ascendió a 109 y en 2014, a 92, entre perros y gatos, principalmente.
En total, 523 animales han sido separados de sus dueños de colonias consideradas de clase media como Polanco, Condesa, Del Valle, Narvarte, Nápoles, Del Carmen y Lindavista, por citar algunas.
La Agencia de Atención Animal deberá coadyuvar entre los ámbitos de salud, seguridad pública, procuración de justicia, registro, educación y normatividad de criaderos; pero aún no entra en operación, debido al laberinto burocrático en que se encuentra, según protectoras de animales.
En entrevista, la presidenta de la Comisión Especial de Reclusorios en el órgano legislativo local, Rebeca Peralta, alertó que la delincuencia organizada ha visto en el robo de perros, gatos o aves, un negocio lucrativo, pues a través de la extorsión obtienen dinero fácil.
Dijo que el robo exacto de animales se desconoce porque la procuraduría capitalina sólo reporta las averiguaciones previas, de ahí que insistió en que los capitalinos presenten las denuncias correspondientes por el secuestro o robo de algún animal.
Detalló que entre las razas de perros más robadas están los cachorros pomeriano, que valen entre 11 mil pesos; el chihuahua, 4 mil pesos; el schnauzer, 3 mil pesos; el rottweiler, 4 mil 500 pesos; el bull terri inglés, 5 mil 500, y el labrador, 3 mil 500.
A lo anterior, hay que agregar que la Agencia de Atención Animal que preside Sandra Hernández está obligada a crear un registro para ofrecer a los sintientes bienestar y derechos. Esto, al considerar que el país ocupa el tercer lugar en maltrato animal, siendo los perros los que sufren este tipo de violencia.