Ante la contingencia sanitaria por Covid-19, comerciantes miembros de la organización Antorcha Campesina aceptaron de manera voluntaria no instalarse en la vía pública.
Después de una reunión que los líderes de la organización sostuvieron con la autoridad capitalina, reconocieron la situación que se vive a nivel mundial, por lo que antepusieron la integridad de la sociedad potosina.
En ese sentido, alrededor de 600 comerciantes ambulantes que se instalaban en la explanada Ponciano Arriaga y en la zona conocida como de “huaracheros”, a partir de este miércoles dejaron de colocarse para ofrecer mercancía de diferentes giros, entre ropa, juguetes y alimentos, medida para evitar la propagación del coronavirus.
La administración capitalina, a través de la Dirección de Comercio Municipal, reconoció la buena disposición y solidaridad de los oferentes, que accedieron a mantenerse lejos de los riesgos para la salud y esperar la nueva disposición oficial cuando el panorama sanitario se torne más seguro.
ev/etp*