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Este primero de julio, por disposición federal se aplicará la llamada “Ley Seca”, que no es otra cosa que la prohibición para vender y suministrar bebidas alcohólicas a la población, con el argumento de que por un lado puedan ejercer su voto sin estar bajo los influjos de ninguna sustancia y por otro lado que la embriaguez de algunas personas derive en conflictos de tipo político electoral.
De acuerdo al artículo 300 de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales se establecerá en cada entidad de la República una restricción a la venta y consumo de bebidas embriagantes, con motivo de los comicios electorales que puede ir desde 24 hasta 72 horas, según lo determinen las autoridades locales.
En San Luis Potosí (y en respuesta a una solicitud de información) el director de gobernación de la Secretaría General de la Administración Estatal, Roberto González Rubio estableció que será de 48 horas la veda, siendo desde las 00 horas del sábado 30 de junio hasta las 24 horas del 1 de julio, eso incluye - según refiere - a eventos y fiestas privadas de cualquier persona, no sólo establecimientos comerciales.
Según el documento en la ley se puede leer específicamente “deberán suspender la distribución, venta y suministro de bebidas alcohólicas”, es decir, que no menciona la venta o el lucro específicamente, ya de facto los bares y antros que se dedican a la venta del producto no abrirán sus puertas, pero no sólo eso, sino que bajo cualquier caso, sea una fiesta en un salón de eventos, o en el jardín de tu casa, estarías violando la ley si proporcionas algún tipo de bebida alcohólica a cualquier persona.
No obstante, este reglamento entra en contradicción con otras leyes generales, puesto que ninguna autoridad puede ingresar a propiedades privadas sin una orden específica, es decir, que ni la policía ni inspectores de gobernación pudieran entrar a revisar si en efecto se está cumpliendo con la famosa “Ley Seca”.
samuel.estrada@clabsa.com.mx
vkc
