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Este 25 de agosto se celebra al santo patrono de la ciudad, San Luis Rey de Francia un personaje representativo como emblemático al ser su silueta el símbolo de esta ciudad a través del escudo de armas, donde aparece apostado sobre el Cerro de San Pedro, el lugar donde se dieron los primeros asentamientos humanos como parte de la actividad minera que se desarrolló en la zona.
La investigadora de la Facultad de Ciencias y Humanidades de la UASLP, además de historiadora Gabriela Torres Montero, explica que con la llegada de los europeos a América se inició la búsqueda de lugares para la explotación de la minería, algunos de ellos se establecieron dentro de lo que se conoce como “Camino Tierra Adentro”, pasando por puntos como Zacatecas y en su tránsito hacia el norte del país, arribaron a tierras como Cerro de San Pedro. El nombre de la ciudad, se atribuye a Don Luis de Leija y el nombre de Potosí provino de la fama y leyenda de las minas de Potosí, en Bolivia ("Vale un Potosí" se decía en esa época significando que algo valía mucho).
Señala que en las nuevas generaciones existe poco conocimiento de estos antecedentes históricos debido a que el pasado se percibe como algo que aconteció solamente y que quizá tenga poca relación con lo que se vive actualmente, sin embargo, estima que la historia no debe verse solo como un tema de conversación, sino de interés para conocer las raíces de una civilización y los antecedentes que hay detrás para generar en la actualidad un bien común.
“Pero creo que ese es uno de nuestros retos como historiadores, dar a conocer la importancia no como algo que sucedió, sino ver la trayectoria y de fortalecer ese sentido de pertenencia a una cultura, a una estructura social que de alguna manera nos permite hacer y conocer las acciones que nos dan bienestar o bien común”, señala Gabriela Torres Montero.
¿Qué significa para los potosinos ser originarios de esta ciudad?
Para los nacidos en San Luis Potosí, y para quienes han adoptado este lugar como su lugar de residencia vivir en esta ciudad es motivo de orgullo; su riqueza, arquitectónica y cultural son motivo de presumir a cualquiera.
No existe potosino que no se emocione al escuchar las estrofas de la acuarela potosina entonando “Yo soy de San Luis Potosí, y es mi barrio San Miguelito...”.
Y aunque con gran orgullo reconocen a su natal ciudad, son pocos los que saben a detalle su historia, el origen de su nombre y su santo patrono.
La grandeza de la ciudad, a decir por sus habitantes radica en su gente, sus calles, la majestuosidad de sus edificios y monumentos. Su centro histórico es inigualable para pasear por sus plazas y jardines.
“A mí me gusta mucho el centro, sus plazas, sus jardines son preciosos para caminar por las tardes”
“Es una ciudad llena de riqueza cultural con sus edificios, museos, la arquitectura es como la de pocos lugares”
“Yo soy orgullosamente potosina y siempre que puedo le digo a la gente que venga a visitarlo”
“Para mí el centro histórico es mi favorito, tenemos un centro histórico precioso por eso es patrimonio de la humanidad”.
Con el paso del tiempo hay símbolos que han quedado arraigados y que indiscutiblemente se asocian con la identidad potosina, algunos van desde un edificio hasta un platillo. Es sabido, incluso en otros estados que quien visita al ciudad no debe pasar por alto probar los tradicionales “tacos rojos” que se preparan principalmente en los siete barrios, degustar los tradicionales chocolates Costanzo, visitar monumentos como el Centro de las Artes, fotografiar la caja del agua, entre otros.
San Luis Rey de Francia, los colores azul y oro, el águila y nopal son símbolos que todo potosino atesora y celebra en el marco del festejo del santo patrono.
