La incidencia delictiva en fraccionamientos residenciales de reciente creación como Villa Magna repercute en su plusvalía de los mismos así como en la compra de viviendas, reconoció la encargada de despacho del Instituto de la Vivienda del Estado, Janeth López.
"Claro que desincentiva, no es una cuestión que alguien quiera vivir en un lugar donde se están generando robos, pero son casos aislados, crecer como estado va a traer consecuencias buenas como malas", explicó.
Aunque no detalló una cifra particular, señaló que aún hay varios fraccionamientos en la capital potosina que no han sido entregados a municipio y sea quien se encargue de brindar los servicios básicos, sin embargo, ante casos de emergencia como los que se han presentado en estos fraccionamientos, los cuerpos policiales han reaccionado de forma certera y eficiente.
"Las razones por las cuales no se municipalizan son principalmente del fraccionador, porque no se quiere municipalizar, si son los costos los servicios lo lógico nos llevaría a que un fraccionador o un desarrollador buscaría municipalizar para dejar de cubrir esos costos que implica el alumbrado, el mantenimiento de áreas verdes, vialidades, etcétera, pero a la vez lo que ellos buscan es mantener el nivel residencial de su fraccionamiento", precisó.
Reconoció que los fraccionamientos que no se han municipalizado carecen de algunos servicios pero gozan de otros atractivos.
"Ellos compensan una cosa por otra, dicen tal vez al entregarlo puede a bajar una cierta plusvalía y prefieren en lo que madura el proyecto, mantenerse a cargo de esa administración y ese proyecto", finalizó.
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gpl