La Dirección de Ecología Municipal se mantiene a la espera del Plan de Ordenamiento Territorial para poder definir un espacio adecuado que tenga la vocación de uso de suelo requerida para la operación de ladrilleras, que en su mayoría se encuentran ubicadas sobre la zona norte de la ciudad, donde hasta la fecha la actual administración ha aplicado siete clausuras, por la falta de una licencia de funcionamiento y por la combustión de fuentes prohibidas para sus procesos de elaboración.

Israel Esparza Rodríguez, titular del área, dijo que dicho documento podrá establecer con más precisión donde pueden estar ubicadas las ladrilleras, pues actualmente la mayor parte de los contaminantes van hacia la mancha urbana y hay probada afectación ambiental, por lo que señaló que además del plan, se requiere que la Secretaría de Ecología y Gestión Ambiental (Segam) comience a establecer un acercamiento con los productores para estudiar una eventual reubicación, que ya responda a las características ambientales requeridas de uso de suelo y manejo de materiales alternos para la combustión.

El funcionario municipal no precisó si el proceso para poder consolidar la reubicación alcance a la actual administración capitalina, además de la posibilidad de que los propietarios se vean reacios a la propuesta.

Finalmente, recordó que las clausuras a las ladrilleras obedecen principalmente a denuncias hechas por habitantes cercanos, particularmente de fraccionamientos como Los Tules y Adolfo López Mateos, además de organizaciones sociales defensoras del medio ambiente, que se involucran en el cuidado de la calidad del aire que se tiene en San Luis Potosí, y advirtió que los sellos de clausura colocados no pueden ser removidos, de hacerlo, habría una sanción de carácter penal para quien viole la norma.

sergio.marin@clabsa.com.mx

apl

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