Las bodegas con la venta de frutas, verduras, abarrotes y alimentos preparados en la Central de Abasto de San Luis Potosí continúan operando bajo la vigilancia de las autoridades sanitarias, con la finalidad de evitar un brote de Covid-19 en este lugar.

En entrevista con EL UNIVERSAL San Luis Potosí, el presidente del Patronato de la Central de Abastos, José Luis Olivares, aseveró que sigue la labor de vigilancia, apoyándose con un equipo de enfermeras para verificar que se respeten las recomendaciones sanitarias, como la sana distancia, uso de cubrebocas, de gel antibacterial, además del monitoreo diario, donde se acude a cada bodega, se realizan los cuestionarios y toma de temperaturas a locatarios, empleados y clientes.

A la fecha, más de 500 locatarios han tomado la capacitación sobre manejo higiénico de los alimentos, así como medidas básicas de prevención del Covid-19, impartida por la Secretaría de Salud por conducto del personal adscrito de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, Dirección de Comercio Municipal, Protección Civil, Seguridad Pública estatal y Municipal, y el Patronato de la Central de Abasto.

Durante estas últimas semanas, el flujo de personas que se ha registrado ha tenido un ligero incremento en comparación a cuando inició el período de distanciamiento social; sin embargo, a decir del líder comercial, las ventas se encuentran por debajo de los índices de una temporada "normal".

etp

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