La tranquilidad del Colegio Salesiano Carlos Gómez, ubicado en la colonia Jardín de San Luis Potosí, se vio alterada este miércoles tras la circulación de mensajes entre madres y padres de familia que advertían sobre una supuesta conversación entre alumnos en la que se mencionaba el ingreso de armas de fuego.
La advertencia generó inquietud entre la comunidad escolar y, de acuerdo con testimonios, varios padres acudieron a retirar a sus hijos del plantel.
La Guardia Civil Estatal acudió al colegio para hablar con las autoridades y se verifico que todo estaba en orden; sin embargo, en redes de mensajería circularon versiones sobre alumnos en estado de nerviosismo, incluso algunos llorando, mientras se difundía que los responsables ya habían sido identificados.
Las madres y padres de familia coincidieron en pedir sanciones ejemplares contra los estudiantes involucrados. “Estos temas son demasiado delicados, no podemos tomarlos a la ligera”, señaló un padre.
Otros insistieron en la necesidad de reforzar las medidas disciplinarias y de seguridad al interior del colegio.
Más tarde, la institución emitió un comunicado oficial en el que rechazó la existencia de un arma dentro del plantel. Explicó que, al conocerse los rumores, se activaron de inmediato los protocolos de seguridad en coordinación con las autoridades competentes, y tras la revisión correspondiente se descartó cualquier riesgo para la comunidad escolar.
“Les pedimos mantener la calma, no difundir información no verificada y atender únicamente los comunicados oficiales que se envíen por la plataforma institucional”, precisó el documento.
Aunque la escuela aseguró que la situación no pasó de un rumor, el episodio puso en evidencia la sensibilidad del tema entre los padres de familia, quienes señalaron que el solo hecho de escuchar la palabra “arma” en voz de los estudiantes amerita medidas preventivas firmes.
El colegio confirmó que se tomó nota de los alumnos mencionados y que se aplicarán las acciones correspondientes. Mientras tanto, los padres insisten en que la seguridad escolar debe mantenerse como prioridad absoluta.