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Entre los rincones de San Luis Potosí se encuentra el asilo Colibrí, una casa donde los adultos mayores encuentran no solo un techo y una cama, sino también amor, respeto y dignidad en cada gesto de quienes los cuidan.
Este asilo, fundado hace dos años, aunque el proyecto comenzó hace aproximadamente seis, ha sido un refugio para muchos que, en su etapa de vida más avanzada, han necesitado un espacio donde puedan sentirse acompañados,comprendidos y sobre todo cuidados por gente capacitada para hacerlo.
Para conocer más sobre la historia de este lugar, EL UNIVERSAL San Luis Potosí entrevistó a Fernanda Miranda, la fundadora y directora de Colibrí Casa del Adulto Mayor, quien es una mujer cuya pasión por cuidar a los demás ha sido la chispa que ha encendido este proyecto.
“Se llama Colibrí por algo muy personal que me pasó y también por qué me gustan los colibríes pero sobre todo por su significado el cual hace referencia a que en diferentes culturas ancestrales significa la muerte en las noches frías del invierno y la resurrección a la vida con el amanecer de la primavera”, comentó Fernanda.
Una idea que nació del corazón
"Colibrí surgió de una necesidad personal", explica Fernanda Miranda mientras recuerda los primeros días del asilo. "Hace unos 6 años, yo era voluntaria en diferentes asociaciones como hospitales, áreas de oncología y entre ellos asilos y realmente fue muy impactante el deterioro que tienen los abuelitos ya que hay mucho abuso, mucha violencia por parte de los asilos de México ya que son pocos los que están regulados y cuentan con lo necesario, así que ahí nació la idea de formar mi propia casa de adultos mayores por qué me di cuenta de que no había muchos lugares en San Luis Potosí que ofrecieran el tipo de cuidado y cariño que ellas y ellos merecen, eso fue lo que me inspiró a crear este lugar".
Casa Colibrí, abrió sus puertas el 15 de junio de 2022, en una casa ubicada en Colinas del parque.
“Colibrí es una casa, no lo siento como asilo por eso se llama casa Colibrí”, afirmó Fernanda.
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La idea para todo el personal que labora en este lugar siempre ha sido el brindar comodidad y confianza en las personas que viven ahí, tanto que sientan como si estuvieran en su mismo hogar.
Un espacio de respeto y dignidad
Casa Colibrí es conocida en la comunidad como un lugar donde se honra y respeta a los adultos mayores, actualmente son 13 personas las que viven ahí, cuenta con servicio de guardería geriátrica y de estancia permanente.
"Aquí creemos que cada persona tiene una historia y merece ser escuchada, no solo brindamos cuidados básicos; aquí, cada residente es tratado como familia, organizamos actividades para mantenerlos activos y felices, desde clases de motricidad fina y gruesa, actividades de manualidad y música por especialistas en el área ya que queremos que cada uno sienta que su vida sigue teniendo propósito y valor", enfatizó Fernanda.
La iniciadora de Casa Colibrí comparte una actividad que ilustra la filosofía del asilo: "nosotros siempre festejamos los cumpleaños de cada persona de ahí, hacemos fiestas, a ellos les encanta festejar, las visitas, convivir con gente, todo”.
Cabe destacar que, la mayoría de las personas que están en casa Colibrí tienen una patología que si bien no es grave en algunos casos si necesitan una atención médica, la cual también se les brinda.
“Todos son atendidos por gente capacitada en enfermería y una vez al mes los ve el médico geriatra, no solo son cuidadores los que los atienden”, puntualizó Fernanda.
Fernanda finalizó subrayando que las personas que habitan en Casa Colibrí están ahí no por qué no tengan familia o no los quieran, al contrario, por el hecho de que saben que necesitan una atención especial y prefieren sean cuidados con paciencia, amor, responsabilidad y tiempo.