Entre fiesta, carros adornados con globos de colores, narices rojas, música alegre y maquillaje, niños, niñas, adolescentes y adultos payasos y payasas, inundaron las calles de la capital potosina con un desfile para conmemorar el Día del Payaso.
Desde las 11 de la mañana las y los payasos se juntaron en el Jardín de Tequis, ubicado sobre avenida Venustiano Carranza, para participar en una misa de agradecimiento en la Iglesia del Barrio de Tequisquiapan.
Al salir del evento religioso tomaron la avenida Venustiano Carranza, en dirección a la Plaza del Carmen, en el centro histórico de la ciudad, para repartir dulces, tomarse fotos con chicos y grandes, además de repartir sonrisas con sus chistes, trajes y bailes graciosos.
La fiesta y alegría se fue contagiando poco a poco entre las personas que se encontraban cerca del Jardín de Tequis y del Centro Histórico, además de quienes paseaban con sus familias y mascotas sobre avenida Carranza en el Paseo Dominical.
Este tradicional desfile se retomó tras tres años de pandemia, debido a que las condiciones por el virus SARS-CoV-2 impedían la aglomeración de personas en espacios al aire libre o cerrados.
Según comentaron payasos organizadores y participantes del evento, el salir este 10 de diciembre Día del Payaso, significa mucho en su profesión como artistas circenses y del clown pues durante la contingencia sanitaria del Covid-19 despidieron a muchos compañeros que murieron a causa de la enfermedad y por la falta de empleo, muchos tuvieron problemas económicos.
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