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En la Plaza del Carmen en la ciudad de San Luis Potosí, casi enfrente del Templo de Nuestra Señora del Carmen, se erige una estatua que representa la importancia que tiene la Procesión del Silencio en la capital potosina, al ser esta considerada la segunda mejor del mundo, seguida de la original en Sevilla, España.
Este monumento que este 2024 cumple 12 años, fue inaugurado en abril del 2012, se trata de “El Cofrade”, escultura creada por el artista Miguel Cuevas, la cual fue instalada a través del ayuntamiento capitalino de la época, teniendo a Luis Miguel Ávalos Oyervides como presidente municipal.
Esta obra artística es un símbolo y homenaje a la importancia religiosa y cultural que tiene la Procesión del Silencio de manera internacional, además de ser expuesta en honor a las cofradías más antiguas y fundadoras de esta tradición: La Cofradía de Nuestra Señora del Carmen, la Cofradía Franciscana Santo Entierro y a la Cofradía de la Soledad.
Esta icónica escultura que yace en el corazón del centro histórico potosino muestra a la figura más representativa de la Procesión del Silencio: al cofrade, aquella persona que marcha con un vestuario muy especial.
En esta obra de arte se representa el hábito del cofrade, el cual se forma por una túnica, una capa, un cinto que se amarra a la cintura y el famoso capirote, que es la máscara y sombrero en forma de cono que cubre la identidad de quien lo porta.
Este vestuario suele ser visto de varios colores entre las cofradías de la capital potosina, ya que cada una de ellas imprime el sello de su parroquia al crear el vestuario con los colores representativos de cada una de ellas.
La escultura de “El Cofrade” puede encontrarse a las afueras del Templo de Nuestra Señora del Carmen, ya que es ahí donde da inicio la Procesión del Silencio, en esta temporada vacacional las y los visitantes aprovechan la ocasión para tomar fotografías en esta emblemática escultura potosina.