El histórico mercado 16 de Septiembre, ubicado en pleno corazón de la capital potosina, ha perdido casi su esencia. Lo que antes fue un hervidero de actividad y ventas, hoy sobrevive con apenas pocos comerciantes, se ha convertido en un vestigio casi desierto.
Fundado en 1971 y popularmente conocido como el "mercado de los Fierreros", este emblemático centro de comercio está ubicado sobre la calle del mismo nombre, metros adelante del mercado República y colindando con los barrios de Santiago y Tlaxcala.
Este mercado fue testigo de décadas de vida diaria. Sin embargo, en los últimos años ha sufrido un abandono paulatino.
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En un recorrido realizado por EL UNIVERSAL San Luis Potosí se pudo constatar que la situación se ha agravado por pasillos semi vacíos, fachadas deterioradas y nula vigilancia. Usuarios señalaron que el lugar se ha vuelto “una tierra de nadie”, con señalamientos de inseguridad, robos recurrentes y presencia de indigentes.
Hoy, en esos pasillos que alguna vez midieron cientos de puestos, sólo permanecen unos tres comerciantes, ambulantes la mayoría dedicados a herrería, herramientas usadas y ropa, su falta de locatarios y la ausencia de visitantes dibujan una postal de desolación.
Incluso su fachada y calle donde se encuentra impone aire de abandono que intimida: paredes despintadas, grafitis desgastados y rejas oxidadas generan una sensación de inseguridad que se intensifica al observar a las pocas personas que pasan por la zona.
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Algunos vecinos de la zona señalaron que que hay presencia constante de personas en situación de calle o bajo los efectos de alguna sustancia, lo que provoca que muchos transeúntes eviten pasar por ahí.
Más allá de la nostalgia, el colapso administrativo ha sido evidente: no han logrado reactivar el espacio, ni con inversión, ni con campañas de seguridad ni de promoción. ¿Qué sigue? Sin intervención oficial o privada, este pedazo de historia urbana podría convertirse en un recuerdo efímero más.