Ante la cercanía de las celebraciones de fin de año, el comandante del Honorable Cuerpo de Bomberos Metropolitanos, Adolfo Benavente, reconoció que el uso de pirotecnia forma parte de una tradición profundamente arraigada en muchas familias, por lo que resulta difícil erradicarla por completo.
Sin embargo, enfatizó la importancia de adoptar medidas preventivas para reducir riesgos.
“Es una tradición bastante arraigada y por el momento es imposible que no se utilice pirotecnia, pero sí podemos prevenir accidentes e incendios”, señaló el comandante.
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Benavente hizo un llamado especial a proteger a los menores de edad, indicando que no deben manipular pirotecnia sin la supervisión directa de un adulto.
Asimismo, recomendó revisar cuidadosamente el lugar donde se encenderán los cohetes.
“No permitan que los menores quemen pirotecnia solos; siempre deben estar bajo el cuidado de un adulto y verificar que no haya brasas, fuego o alguna fuente de calor que pueda provocar un incendio”, advirtió.
Otra de las recomendaciones clave es mantener cerradas las viviendas y vehículos durante el uso de pirotecnia, ya que las chispas o mechas pueden introducirse fácilmente y causar siniestros.
“Es muy recomendable cerrar las ventanas de las casas y de los carros, porque las colillas o mechas brincan, se meten y pueden provocar incendios en casas o incluso prender los vehículos”, explicó el comandante.
Finalmente, el jefe de bomberos pidió a la ciudadanía no almacenar pirotecnia dentro de los hogares y utilizarla de inmediato con las debidas medidas de seguridad.
“Si compran cuetes, por favor no los guarden en su casa; úsenlos de inmediato con la debida precaución y seguridad, y no los avienten debajo de los carros porque también se pueden prender”, concluyó Benavente.