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Entre flores de color naranja y el olor característico del cempoalxóchitl o cempasúchil, Humberto Alvarado, productor de esta flor que adorna los altares y casas de todo el país por Día de Muertos, explicó que este 2023, pese a la sequía que se vive en la zona metropolitana del estado, sus cultivos no fueron afectados por la falta de agua.
Destacó que en su caso, como en el 90% de los productores de la flor de 20 pétalos, sus cultivos son regados por goteo, lo que les permitió esta temporada mantener hidratados sus campos y poder cultivar y cosechar las flores.
Humberto Alvarado es originario de Soledad de Graciano Sánchez, desde hace cinco años comenzó a cultivar en sus parcelas ubicadas en la comunidad de Palma de la Cruz de Soledad, la flor de cempasúchil, debido a que se vende bien durante la temporada en la que conmemoramos a nuestros difuntos.
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En entrevista para EL UNIVERSAL San Luis Potosí, comentó que él y su familia se dedican todo el año a sembrar y comerciar legumbres, lechuga y repollo, sin embargo, por la alta demanda que hay en el estado, desde el mes de agosto a octubre cultivan las flores.
Desde inicios del mes de agosto, se pone a germinar la semilla del cempoalxóchitl, después de quince días, que la planta ya creció se traspasa al suelo que le dará los nutrientes necesarios para ser cortada entre el 26 y 27 de octubre, para posteriormente adornar las casas, altares e incluso hacer con ella postres, comidas o bebidas como el pulque o atole.
Para este 2023, según comentó la familia Alvarado, sembraron más flores e incrementaron el costo del manojo de 80 que se vendía el año pasado a 100 pesos para este año, con el objetivo de hacer que más personas puedan adquirir cempasúchil.
“El año pasado sí hubo mucha gente que se quedó sin flor, pero este año hay más y algunos ya vinieron a apartar sus manojos”, concluyó Humberto.
