La presencia de vendedores ambulantes sigue creciendo, especialmente en Plaza de Armas, donde se ha convertido en una constante fuente de conflicto.
A través de un recorrido realizado por EL UNIVERSAL San Luis Potosí, se observó la proliferación de puestos informales que obstruyen los pasos peatonales y afectan la movilidad en esta zona emblemática de la ciudad.
Los comerciantes establecidos señalaron que la situación ha empeorado, afectando no solo la visibilidad de sus negocios, sino también la experiencia de los transeúntes, quienes prefieren evitar la plaza debido a la multitud y el difícil tránsito que genera la aglomeración de vendedores ambulantes.
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Además, algunos de los comerciantes manifestaron que la presencia de estos puestos informales ha provocado una disminución en la afluencia de clientes en los negocios formales, que ven mermada su visibilidad y competitividad en un área que debería ser un atractivo turístico y comercial.
En particular, el plantón que se mantiene en Plaza de Armas, cuyo objetivo principal es protestar contra la administración estatal, también se ha convertido en un punto de fricción entre los vendedores informales y los establecidos.
Los primeros, por su parte, defienden su derecho a vender en el espacio público, mientras que los segundos reclaman por el desorden y las dificultades que esto genera en el comercio local.
La situación sigue siendo un reto para las autoridades municipales, que aseguran estar trabajando para mantener el orden, pero que aún no han logrado una solución efectiva que calme la creciente tensión entre ambos grupos.