En medio de una temporada de lluvias atípicas, viviendas de la capital de San Luis Potosí han sufrido graves daños. Las precipitaciones torrenciales de los últimos días han transformado las calles de la ciudad y sus alrededores en ríos caudalosos, arrasando con todo a su paso.
Las intensas lluvias derivadas de la tormenta tropical número 13 han dejado huella en las viviendas de las y los potosinos, ya que sus viviendas están inundadas. Al caminar por las colonias más afectadas, como el fraccionamiento Insurgentes, Villas de San Lorenzo, barrio de San Miguelito, fraccionamiento B. Anaya y avenida Constitución, se puede apreciar la desesperación que enfrentan al intentar sacar el agua que ingresó a sus casas con cubetas y botes.
Las casas muestran cicatrices de desastre: paredes cubiertas de lodo, muebles flotando en el agua, paredes y techos humedecidos por el agua acumulada.
Los residentes, aún con ojos de frustración, relatan cómo el agua invadió sus hogares en cuestión de minutos, sin darles tiempo a salvar sus pertenencias. Dulce Reyna, residente de la calle Acatita de bajan, del fraccionamiento Insurgentes, narra el calvario que sufrió su familia por las inundaciones causadas por las fuertes lluvias desde el pasado miércoles, “sentimos mucha angustia, al ver como el agua subía de nivel y se estaba metiendo a la casa”, expresó.
Está zona es uno de los lugares con mayor afectación, Dulce y su familia perdieron muebles y parte de su patrimonio que con esfuerzo lograron comprar gracias al trabajo de años.
“Prácticamente, se echaron a perder el refrigerador, muebles de madera, camas, comedor y los aparatos electrónicos se pudieron salvar por qué los pudimos subir a la mesa y sillas”, afirmó la residente del fraccionamiento Insurgentes.
Otra colonia que se encuentra seriamente afectada es la zona de B. Anaya, los habitantes de ese sitio manifiestan que las calles parecían ríos y no podían ni abrir la puerta porque el agua entraba.
“Yo necesitaba salir al trabajo, pero no podía ni abrir la puerta de mi casa porque se metería toda el agua, de por sí ya estaba en la cochera”, expresó Berenice, habitante de la zona de B. Anaya.
Berenice comentó que jamás se imaginó vivir algo así, llena de angustia. “Es como si todo se hubiera desmoronado en un instante”.
Otro lugar afectado es el barrio de San Miguelito, ya que las calles ya están abiertas por la reparación que se está haciendo, ahora con la lluvia se incrementó la cantidad de baches, lodo, accidentes y humedad en las casas. Luis Alfonso, vecino del barrio, señaló que pensaba que la calle colapsaría de tanta agua porque empezaba a subir mucho el nivel la tarde del viernes.
“Nosotros, ya de por sí, sufrimos por las calles abiertas y luego con la lluvia, esto se volvió un caos total, el agua al subir de nivel, el lodo que trae y la fuerza de la misma agua. Yo pensé que colapsaría la calle, por temor no salimos”, comentó.
Las personas del barrio de San Miguelito compartieron que, además de los estragos que el agua y el lodo causaron a las viviendas, lo que más les preocupa es que también sufren estragos en la salud.
“A mí lo que me da más miedo son las enfermedades porque tenemos mucho lodo y tierra aunado al agua, las alergias y enfermedades respiratorias empiezan a llegar sobre todo en niños y personas de la tercera edad de este barrio”.
En la avenida Constitución el agua también causó daños, desde el mediodía comenzó a subir el nivel y para la tarde las cocheras y entradas de las casas se convirtieron en pequeñas lagunas. Rosa, una mamá con tres pequeños, argumenta que el agua comenzó a meterse a su casa y al ver que no podía hacer nada para detenerla, agarró a sus hijos y los subió a los sillones, porque pensó que empezarían a flotar en el agua. “Me angustie mucho y agarre a mis tres hijitos y los subí a los sillones antes que el agua subiera más y se ahogaran o empezaran a flotar”.
Cabe destacar que los habitantes de estas zonas coinciden en que mucho de lo que están viviendo es causado por el drenaje en mal estado que tiene la ciudad y la acumulación de basura en las calles y alcantarillas de sus zonas.
Cabe señalar que Juan Antonio Villa, comisario de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, informó que en estos días la lluvia llegó a alcanzar un 30 por ciento de lo que usualmente llega a ser en un año. Los residentes de las colonias afectadas hacen un llamado a las autoridades en turno para que tomen cartas en el asunto y evitar que más familias pasen por situaciones aterradoras.