Turquía ha iniciado, bajo el nombre "Operación fuentes de paz", la ofensiva militar en Siria contra las milicias kurdosiras, anunció este miércoles el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, en Twitter.
El presidente turco, Recep Tayyip Erodogan, anunció el inicio de la operación militar turca contra la milicia kurda de las Unidades de Protección del Pueblo (YPG), grupo apoyado por países occidentales, pero perseguido por Ankara.
"Las fuerzas armadas turcas y el Ejército nacional sirio (rebeldes sirios apoyados por Ankara) dieron inicio a la operación 'Fuente de paz' en el norte de Siria", dijo Erdogan en la red social Twitter.
Coincidiendo con este anuncio, los periodistas de la AFP escucharon una fuerte explosión en la región Ras al Ain, en la frontera entre los dos países.
Erdogan precisó que la operación se dirige contra tanto contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI) como contra las milicias kurdosirias Unidades de Protección Popular (YPG), que dominan el noreste de Siria, y que habían recibido hasta esta semana el respaldo de Estados Unidos.
"Preservaremos la integridad territorial de Siria y liberaremos a las comunidades locales de las garras de los terroristas", agregó el mandatario, en referencia al YPG.
Al mismo tiempo, cazas turcos han empezado a bombardear la ciudad de Ras al Ayn, en el noreste de Siria, en lo que parecen los preparativos de la planificada ofensiva terrestre.
La cadena CNNTürk muestra en directo la imagen de columnas de humo procedentes de la ciudad fronteriza, controlada por las YPG, y asegura que se oye un continuo sobrevuelo de cazas.
La ofensiva se inició poco después de que Erdogan agradeciese en una conversación telefónica a su homólogo ruso, Vladimir Putin, su "postura constructiva" ante la ofensiva turca.
Turquía aspira a controlar una franja adyacente a la frontera siria de 32 kilómetros de ancho y 480 de largo, desde el Éufrates hasta Irak.
Ese territorio está dominado por las YPG, que han establecido una administración local de facto que preocupa a Ankara.
Turquía considera terroristas a las YPG -aliadas de Estados Unidos en la lucha contra el EI- por sus vínculos con el grupo armado PKK, activo en suelo turco.