Las autoridades de Nueva York se vieron obligadas a declarar en la ciudad una “emergencia de salud pública” por un brote de sarampión, una enfermedad que se consideraba erradicada, hasta el punto de amenazar con multas de hasta mil dólares a quienes no se vacunen contra el virus.
Estados Unidos vive un rebrote del sarampión, en gran parte debido a los movimientos antivacunas. La situación en Nueva York urgió al alcalde Bill de Blasio a tomar medidas extraordinarias para hacer frente a un brote“muy preocupante y que debe ser gestionado de inmediato”.
En el caso neoyorquino, los afectados se concentran en un área de alta población judía ultraortodoxa en el barrio de Williamsburg, en Brooklyn. Todo indica que el actual brote se inició por un menor de edad sin vacunar que estuvo en contacto con el virus durante un viaje a Israel. Según datos oficiales, desde septiembre de 2018 se han documentado al menos 285 casos sólo en Williamsburg. La cifra de infectados sube y la ciudad de Nueva York fue responsable de dos terceras partes de todos los nuevos casos. En 2017 hubo sólo dos enfermos aquí.
“No podemos permitir que esta enfermedad peligrosa regrese, debemos frenarla ahora”, urgió De Blasio. Para ello, su gobierno municipal dio 48 horas a todos los habitantes mayores de seis meses de cuatro distritos del barrio de Williamsburg, en Brooklyn, para que se vacunen. En caso de no hacerlo podrán ser multados con hasta mil dólares. “La vacuna del sarampión funciona. Es segura, es efectiva y ha sido probada… Cuanto antes acatemos la orden, antes la levantaremos”, dijo De Blasio.
“El sarampión es tan contagioso que si una persona lo tiene, hay más de 90% de posibilidades de que personas cercanas que no han sido inmunizadas sean infectadas”, aseguró en su página en línea el Centro de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
El movimiento antivacunas es tan poderoso que algunos padres llevan a sus hijos a “fiestas del sarampión”, en las que exponen a los niños a la enfermedad para que se contagien y, tras superarla, tengan los anticuerpos para no contagiarse en el futuro.