El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, este martes expresó en Bratislava su esperanza de que todos los gobiernos retiren su apoyo al Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, para dárselo al opositor Juan Guaidó.
"Espero que las demás naciones lo vean, creemos que es correcto, en el espíritu de libertad y democracia", declaró Pompeo en una rueda de prensa tras recordar que tanto su país, como 24 miembros de la Unión Europea (UE), han reconocido a Guaidó como jefe de estado interino de Venezuela.
El secretario de Estado reiteró que la expectativa de Washington es que "toda la comunidad de naciones quite su apoyo a Maduro y apoye a la gente" del país latinoamericano donde "las condiciones humanitarias son catastróficas".
"Esperamos poder hacer entregas de ayuda humanitaria", añadió el jefe de la diplomacia estadounidense. Estimó que para que la asistencia donada llegue a la población será necesario que Maduro abandone el poder.
"Todo esto (la ayuda) no puede concretarse si Maduro está aferrado al poder", señaló Pompeo, quien en Bratislava se reunió con su homólogo eslovaco, Miroslav Lajcak, el Presidente, Andrej Kiska, y el primer ministro, Peter Pellegrini.
Estimó que unos dos millones de venezolanos huirán de su país en un futuro cercano, sumándose a los tres millones que ya han emigrado.
Pompeo tiene previsto hablar con la jefa de la diplomacia de la UE, Federica Mogherini, esta semana en Bruselas sobre los esfuerzos de Estados Unidos para "restaurar la democracia" en Venezuela, así como de su apoyo a Guaidó, jefe electo del parlamento venezolano que se proclamó Presidente interino del país el pasado 23 de enero.
En la capital eslovaca, Pompeo resaltó la voluntad de su gobierno de fortalecer sus vínculos con la UE, en un "sistema libre (de mercado), donde todos puedan competir".
Pocas horas antes, el representante del gobierno estadounidense asistió a un acto en la llamada "Puerta de la Libertad", un monumento en honor de las víctimas del régimen comunista situado en la frontera con Austria, en la confluencia de los ríos Morava y Danubio.
"Han pasado 30 años desde que los liberaron del influjo soviético y entraron en la OTAN. Esta alianza se construyó sobre unos valores comunes que son ahora, cuando la agresión rusa los socava, mucho más importantes", declaró en su discurso ante antiguos presos políticos.
"(Rusia) trata de expandir su influencia y también China", dijo en su discurso, reiterando la advertencia expresada el lunes en Budapest, su primera escala de una gira por Europa cuyo principal objetivo es frenar la influencia de Moscú y Pekín en la región.
Pompeo se traslada hoy mismo a Varsovia, donde además de encuentros bilaterales, participará como coanfitrión en una cumbre que abordará el conflicto israelí-palestino. Las siguientes escalas de su viaje serán Bruselas y Reikiavik.